El plan de vacaciones que cada verano activa la Conselleria de Sanidad para cubrir los descansos del personal y a la vez reforzar las áreas de mayor afluencia turística llega este año con un aumento del 10% en la dotación económica, hasta alcanzar los 79,5 millones de euros, y con una extensión de su vigencia de un mes y medio respecto al año pasado, con lo que se aplicará del 15 de junio al 30 de noviembre. Eso sí, estará marcado por la falta de médicos, que complicará la ejecución de las 8.600 contrataciones planificadas por el departamento que dirige Marciano Gómez. Como alternativas, la Conselleria contempla reajustar horarios, promover la movilidad de facultativos y ampliar el periodo voluntario de vacaciones para los profesionales.
Así se lo ha trasladado la Conselleria a los sindicatos en la mesa sectorial, donde ha presentado sus previsiones para garantizar la asistencia sanitaria durante los meses de verano en la Comunitat Valenciana. La inversión anunciada tiene dos objetivos: los contratos de sustitución para cubrir al personal sanitario que se encuentra de descanso estival y los refuerzos adicionales que se pretenden realizar para dotar los centros de Atención Primaria y consultorios de las zonas de mayor afluencia turística, siempre que exista personal disponible. En esta línea, el plan prevé, "en principio y siempre condicionado a la disponibilidad de personal", más de 8.600 contrataciones, en torno a un millar más que el año pasado. Sanidad atribuye este incremento, principalmente, a la incorporación de los departamentos de Dénia y Manises a la gestión pública directa.
Con el fin de mejorar la atención sanitaria en zonas turísticas de mayor afluencia, la Conselleria de Sanidad ha planificado, además de la apertura de 19 consultorios auxiliares de verano en las playas (cuatro menos que el año pasado), acciones de refuerzo en otros 66 centros de atención sanitaria, mediante el incremento de personal en centros de salud, centros sanitarios integrados o consultorios.
El conseller de Sanidad, Marciano Gómez, explicó que esta planificación pretende "mantener prácticamente la misma prestación asistencial que se ofreció el verano pasado" y anunció que su departamento ha previsto sus "propias alternativas" ante "la inacción del Ministerio de Sanidad para ofrecer soluciones que permitan contar con los 606 residentes que este año finalizan su formación en septiembre, en lugar de en mayo".
Gómez subrayó el "enorme esfuerzo" realizado por su departamento con este plan en el que "en base a la incentivación, la movilización del personal sanitario, a la redistribución de recursos, a la tutorización de los residentes y a la ampliación de los meses de vacaciones", se ha podido cumplir con la totalidad de los recursos de los que se dispuso el pasado año pese a no tener disponibles a los MIR de último curso.
Ante esta "situación excepcional" de "déficit de facultativos" que afronta este verano el Sistema Nacional de Salud, la Conselleria ha anunciado que aplicará medidas como la redistribución horaria en la asistencia, que incluirá, "si es necesaria", la reducción de horarios de atención en algunos centros, la movilidad de facultativos, incentivos, así como la ampliación del periodo voluntario en el que los profesionales podrán disfrutar de sus vacaciones hasta el 30 de noviembre con la finalidad de evitar la concentración de profesionales de vacaciones al mismo tiempo.
Además, los médicos residentes que terminarán su formación en septiembre podrán prestar asistencia de forma tutorizada en su propio centro de salud u otro centro cercano, "siempre de forma voluntaria y con un médico de familia en el centro", excluyendo la asistencia a domicilios y emergencias "sin estar acompañados", explicó el conseller.
Los sindicatos critican el retraso y su ampliación
Los sindicatos CSIF, UGT y CCOO han reprochado a la Conselleria de Sanidad la demora en la presentación del plan de vacaciones de verano y han cuestionado las medidas anunciadas por el departamento dirigido por Marciano Gómez, entre otras, por la ampliación hasta noviembre del periodo vacacional, por el que reclaman tres días adicionales para el personal que acceda a esa opción fuera del tiempo ordinario.
CSIF trasladó su "preocupación" y lamentó la "falta de colaboración" del Ministerio en relación con los MIR, mientras UGT cree que el plan "puede deteriorar seriamente la calidad asistencial que se prestará a la ciudadanía este verano".
Desde la oposición, el portavoz de Sanidad del PSPV-PSOE en Les Corts, Rafa Simó, afirmó que el plan de vacaciones "esconde cierres de consultorios por todo el territorio" y el diputado de Compromís Carles Esteve denunció la contratación de 2.500 profesionales menos que en 2023.
Comentarios