El líder de la oposición, Alberto Núñez Feijóo, ha pedido al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que "no eternice lo que es inviable", es decir, que adelante elecciones, tal y como lleva exigiendo desde el inicio de la campaña. No obstante, Sánchez le ha respondido que "se le va a hacer larga la oposición" y le ha citado para 2027: "Dentro de tres años se van a presentar tres ultraderechas la de usted y la de Abascal y la de Alvise. Y vamos a ganarles a los tres y si no al tiempo". De este modo, el presidente ha dado un paso más calificando al PP de ultraderecha.
Feijóo y Sánchez han renunciado a mantener un diálogo en su primer cara a cara entre ambos desde las elecciones del 9J. El líder de la oposición ha concentrado en un único turno todo su discurso, sin dar pie a los tiempos de réplica. Aun así, el presidente del Gobierno ha eludido a la pregunta de Feijóo: "¿Le va a entregar la presidencia a Puigdemont para que le deje gobernar un tiempo más?". En su lugar, Sánchez ha recurrido a su mayor baza, tal y como había pronosticado segundos antes su adversario: la máquina del fango y la ultraderecha.
Sánchez le ha preguntado a Feijóo de qué le ha servido "poner en marcha la máquina del fango". También le ha responsabilizado de la aparición de la nueva formación Se acabó la fiesta. Según el socialista, Feijóo "abrió la puerta a la ultraderecha" pactando con Vox los gobiernos autonómicos y con "su polarización se ha convertido en el portavoz de Manos Limpias —el sindicato que ha denunciado en los tribunales a la mujer y al hermano de Sánchez por supuesta corrupción—y ahora tenemos dos ultraderechas", en relación con SALF y Vox.
Asimismo, Sánchez le ha dado la vuelta a los resultados de las europeas en las que el PP le superó en dos escaños y cuatro puntos. "Enhorabuena, porque con los resultados del domingo ha logrado que los suyos le permitan continuar como Jefe de la oposición. Se le va a hacer un poco largo, debería aprovechar mejor el tiempo porque ya le veo reiterando eso de elecciones anticipadas", le ha sugerido entre las risas y aplausos de los suyos.
Por su parte, el líder del PP ha dibujado un negro escenario para la continuidad de la legislatura. "Su Gobierno está desbordado, paralizado, usted y los suyos están acorralados por varios casos de presunta corrupción; la mayoría de sus socios están haciendo aguas y los que le sustentan en pie empiezan a abandonarle, de hecho, lleva perdidas varias votaciones en el Congreso. Sé que me hablará de ultraderecha y fango pero seguirá todo igual", ha señalado antes de que el presidente acudiera a estas bazas.
Como ejemplo de que la legislatura "no da más de sí", el popular le ha recordado que en el PP ha conseguido tramitar más leyes desde la oposición que el PSOE desde el Gobierno. Asimismo, le ha relatado los acontecimientos que se han sucedido desde el domingo, hace tan solo tres días: "la manipulación fraudulenta del CIS, la Justicia le ha tenido que pedir que le deje trabajar en paz; se ha visto que aplicar la amnistía no va a ser coser y cantar; ha estafado a los votantes de Cataluña entregando la presidencia del Parlament a independentistas; otras persona de su círculo más íntimo vuelve a estar investigada por corrupción [su hermano, además de la mujer] y tiene una vicepresidenta [Yolanda Díaz] que ha dimitido un poquito".
Con todo lo anterior, Feijóo entiende que no se puede gobernar un país. "No tiene un gobierno sólido, no tiene mayoría garantizada, no tiene presupuestos ni apoyo suficiente en las urnas. Déjelo ya. Sea responsable y pregunte a los españoles", ha exigido el líder de la oposición.
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