La Fiscalía pide 23 años de cárcel para un hombre acusado de acosar a una niña de 12 años por redes: se enviaban fotos y vídeos

La Fiscalía pide 23 años de prisión para un hombre acusado de acosar por redes sociales a una niña de 12 años, a la que obligaba a enviarle fotografías y vídeos íntimos de contenido sexual.

Según el escrito de la Fiscalía, el procesado de 29 años contactó en marzo de 2020 con la menor, que entonces tenía 12 años, y empezaron a hablar hasta crear una relación de amistad y confianza, de la que el acusado se aprovechó para solicitar a la niña que le enviara videos y fotografías desnudas y haciendo prácticas sexuales bajo sus indicaciones.

Asimismo, la representante del ministerio público señala que el procesado también envió fotos y vídeos suyos a la niña en los que le mostraba sus genitales, y que incluso llegaron a realizar videollamadas durante las que ambos se masturbaban.

En el juicio celebrado este miércoles en la sección octava de la Audiencia de Barcelona, el acusado, que está en libertad, ha negado todas las acusaciones, aunque ha reconocido que hablaba con la víctima porque tenían una “relación de amistad”.

La víctima, que aún es menor de edad, ha declarado a puerta cerrada y ha manifestado que mantuvo una relación sentimental con el procesado durante siete meses en los que le manifestó su edad en varias ocasiones, lo que el acusado ha negado explicando que él daba por hecho que era mayor porque “le hablaba de átomos” y él “no sabía a qué se refería”.

En la vista también ha comparecido el padre de la víctima, que ha expresado que la niña tenía un perfil de redes sociales con fotografías acordes a su edad y que en ese momento su hija era “una niña infantil”.

Los agentes de Mossos d’Esquadra que participaron en la investigación han certificado que en el teléfono de la niña no encontraron archivos ni conversaciones sexuales con el acusado, aunque sí con otros dos investigados de los que sí se localizó material sexual de la menor en sus teléfonos móviles y existen pruebas de que llegaron a realizar videollamadas.

En relación con el móvil del acusado, los agentes han afirmado que tampoco encontraron fotografías relacionadas con la menor, aunque entre los más de 35.000 archivos que albergaba el dispositivo localizaron 5 con contenido de pornografía infantil que el acusado ha dicho no saber cómo llegaron ahí, ya que “está en muchos grupos y pasan muchas tonterías”.

El escrito de la fiscal hace referencia a estos archivos como fotografías en las que aparecen menores de edad desnudas, en posiciones sexuales explícitas y manteniendo relaciones sexuales con adultos.

Sin embargo, lo que sí pudieron certificar los agentes fueron conversaciones cariñosas entre el acusado y la niña en las que él utilizaba apelativos tales como “bebé, cariño o amor”.

A preguntas de la fiscal sobre dichas conversaciones, el procesado se ha limitado a decir que es “su forma de ser” y que no había ninguna connotación sexual.

Durante su declaración, el padre de la menor ha manifestado que la niña ha necesitado atención psicológica durante cuatro años, por lo que la fiscal solicita que el procesado indemnice a la víctima con 50.000 euros por los perjuicios morales y psicológicos sufridos.

Por estos hechos, la Fiscalía acusa al procesado de un delito continuado de abusos sexuales a menor de 16 años, por el que pide 12 años de prisión, y de un delito de utilización de menor de 16 años para elaborar pornografía infantil y embaucamiento, por los que solicita hasta 9 años de cárcel.

Además, el ministerio público pide un año de prisión por un delito de exhibición obscena ante menor de edad y otro año por un delito de posesión de pornografía infantil.

Por su parte, la defensa ha pedido la absolución del procesado al entender que, a diferencia de los otros dos investigados, no hay pruebas de que su cliente realizase actos de carácter sexual con la niña.