Un recluso del centro penitenciario de Mas d'Enric (Tarragona) ha agredido este miércoles a tres funcionarios con una barra de hierro. El preso se encontraba en el Departamento de Ingresos de la prisión, donde los diversos profesionales lo evaluaban para ubicarlo en el módulo correspondiente. Este centro penitenciario es el mismo en el que hace tres meses una cocinera fue asesinada por otro recluso.
Alrededor de las 16:50 horas, el hombre cogió un objeto de hierro del patio y golpeó a un trabajador en la rodilla y a otro en el dedo. También golpeó en la cabeza a otro empleado, que ha necesitado puntos de sutura. A raíz de esta agresión, ahora mismo, el preso se encuentra en aislamiento. La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) ha denunciado esta agresión que ha tildado de "salvaje" y ha considerado que "se podría haber evitado".
El CSIF ha denunciado que se trata de un "incidente gravísimo", el cual "estuvo a punto de causar consecuencias todavía peores, evitadas solo por la fortuna". Según el sindicato, esta agresión "se podría haber evitado", puesto que el objeto metálico utilizado por el interno lo habían identificado como peligroso por los trabajadores del Departamento de Ingresos hace más de un año. "Era un objeto a la vista, que fue arrancado de una pared, dejando un agujero. Se preveía que esto podía suceder, que podía llegar a ser utilizado para agredir alguna persona", añaden en un comunicado.
El juzgado de instrucción número 3 de Tarragona decretó este miércoles prisión provisional, comunicada y sin fianza para este hombre, que lo detuvieron por agredir a un peatón con una arma blanca durante el fin de semana pasado en Tarragona. Cinco días antes, también había provocado disturbios con un bate de béisbol. Está investigado por los delitos de lesiones y robo con violencia.
Desde el sindicato, señalan que el recluso es un individuo conocido por su "comportamiento violento y agresivo" en las calles de la capital tarraconense. "Tiene más de media docena de antecedentes policiales y, recientemente, protagonizó dos altercados que produjeron el pánico en la ciudad: agredió con una arma blanca a un peatón, cortándole la cara y, el mismo día, robó a una joven menor de edad, amenazándola con el mismo cuchillo", detallan.
El CSIF también recuerda que este jueves se cumplen tres meses del asesinato de la cocinera de la prisión de Mas d'Enric. "Fue un hecho sin precedentes en las prisiones de Cataluña y el resto del Estado. Hoy en día, ningún alto cargo del Departamento de Justicia, liderado por la consellera Ubasart, ha asumido las responsabilidades de este incidente tan trágico", insisten.
"La carencia de respuesta y responsabilidad es la triste realidad que vive la plantilla de nuestro centro y el resto de las prisiones del sistema penitenciario catalán, que tenemos que afrontar e interiorizar. Desde CSIF queremos destacar el peligro constante al cual nos enfrentamos diariamente. La violencia y agresividad de algunos internos ponen en riesgo nuestra seguridad física y mental", denuncian.
Desde el sindicato aseguran que no reclaman mejores condiciones salariales, sino que exigen que la Administración garantice su integridad física y mental. Por eso, dicen, continuarán denunciando la carencia de medidas y acciones concretas para proteger a los funcionarios de prisiones, "puesto que hay que tomar conciencia de la gravedad de las situaciones que el personal penitenciario vivo día detrás día", cierran.
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