La víctima de la presunta violación de Igualada no tendrá que declarar en el juicio que empieza el próximo 17 de junio en la Audiencia de Barcelona. La fiscalía pide una pena de 45 años para el acusado de violar a la víctima cuando era menor en 2021 e intentar matarla.
Inicialmente se preveía que la chica, que ya es mayor de edad, declarara a puerta cerrada o, incluso, por videoconferencia en otra sala del mismo palacio de justicia. Finalmente, la fiscalía ha cambiado su posición y ha renunciado a la comparecencia de la joven.
Así, el tribunal ha resuelto favorablemente esta petición. En el juicio se hará uso de la prueba preconstituida en iguales condiciones de no publicitado que las acordadas en su momento para la declaración presencial.
En la resolución, la Audiencia ha manifestado que accede a sustituir la declaración de la joven por la reproducción de la prueba preconstituida para "evitar un mayor prejuicio" a la chica y por "la agravación psicológica" que pueda derivarse de su comparecencia presencial, a pesar de las medidas de protección que se habían acordado.
A la vez, ha considerado que su testigo "poco o nada puede añadir a lo que sucedió", dado "el estado de inconsciencia en el que se encontraba y del escaso recuerdo de los hechos". Además, ha remarcado que se dispone de varios informes periciales que pueden determinar las consecuencias físicas y psicológicas que el suceso causó en ella.
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