María José Catalá cumple este lunes su primer año al frente de la Alcaldía de Valencia con el Presupuesto municipal de 2024 aprobado, lo que le ha permitido materializar una de sus principales promesas electorales: la rebaja de impuestos de 70 millones de euros. Tras unos primeros meses de gobierno en solitario, el PP dio entrada a Vox en el Ejecutivo local, lo que afianzó la mayoría de 17 concejales de la derecha frente a los 16 de la izquierda que dejó a Compromís y PSPV en la oposición tras ocho años de gobierno de coalición.
Catalá ha empezado a desplegar su nuevo modelo de ciudad, visible en los diseños urbanísticos y en la movilidad, pero que también se ha percibido en áreas como la seguridad, la limpieza o el turismo. Además, la ciudad ostenta este año la Capitalidad Verde Europea.
Impuestos
La medida que más han notado los contribuyentes valencianos del nuevo Gobierno local ha sido la bajada de impuestos de 70 millones de euros incluida en las ordenanzas fiscales de 2024 y que ha constado de cuatro elementos clave: la rebaja del 20% en el IBI, la bonificación de hasta el 95% en la plusvalías para herencias y transmisiones de negocios o comercios entre familiares vivos, la rebaja del 8,5% en el impuesto de circulación y de 11 millones en la tasa de alcantarillado.
Primer Presupuesto
Las primeras Cuentas del mandato de Catalá salieron adelante tras cristalizar el pacto de Gobierno con Vox. Con un importe global de 1.169 millones de euros, crecieron un 7,11% por los ingreso del Estado pese a la rebaja impositiva. Los Presupuestos dan prioridad al gasto en seguridad, limpieza y vivienda y aumentan un 40% el capítulo de inversiones.
Limpieza
Catalá aplicó el verano de 2023, tras obtener la Alcaldía, un plan de choque temporal para reforzar la limpieza. Tras la entrada en vigor del nuevo contrato, las Cuentas de este año lo han consolidado e incorporan un 50% más de frecuencia de baldeo, la instalación de 10.000 contenedores nuevos y un aumento del personal de recogida y para el borrado de pintadas.
Vivienda
La construcción de 1.032 viviendas durante el mandato fue otra de las grandes promesas electorales de Catalá. De momento, el Ayuntamiento está gestionando la edificación de 846 VPP en 11 barrios a través de cuatro planes de Urbanismo y Vivienda. Para lograr el objetivo anterior, Catalá aboga por desbloquear grandes bolsas de suelo de los PAI pendientes (Grao y Benimaclet) y por la activación de parcelas municipales, así como con la participación en el Plan Vive del Consell.
Proyectos Urbanos
El cambio de diseño del PAI del Grao o de la futura plaza del Ayuntamiento han significado un volantazo respecto al anterior Gobierno municipal. Además, el rediseño del eje Giorgeta-Pérez Galdós se llevará a cabo, de momento, sin suprimir el túnel.
Movilidad
Catalá materializó otra de sus promesas con la vuelta de hasta siete líneas de la EMT al entorno de la plaza del Ayuntamiento, lo que además supuso la reordenación de la calle Colón con el aumento a dos carriles para coches. Además, el Ayuntamiento trabaja con la Generalitat para prolongar la L10 de Metrovalencia por el centro histórico hasta el Pont de Fusta, otra de las promesas de la alcaldesa.
Zona de Bajas Emisiones
Uno de los aspectos que dejó pendiente el anterior Gobierno municipal fue el desarrollo de la Zona de Bajas Emisiones (ZBE) que la normativa estatal obliga a implementar a las grandes ciudades. En diciembre, el equipo de Catalá decidió aplicarla en el área de prioridad residencial (APR) de Ciutat Vella Nord, que cuenta con cámaras de seguridad para multar. La semana pasada, la alcaldesa desveló que en su primer año, 2025, no se sancionará, al aplicar solo una campaña informativa, para dar tiempo a los residentes a adaptarse las restricciones de acceso.
Seguridad
Esta ha sido una de las banderas de Catalá, tanto en campaña como en su primer año al frente del Ayuntamiento. Además del refuerzo en la plantilla de la Policía Local, con la realización de oposiciones en julio de 2023 para más de 120 plazas y la convocatoria el pasado de mes de diciembre para 69 oficiales, el Consistorio ha instalado cámaras en Orriols y la Punta para atajar problemas de convivencia y de robos. En los próximos meses, este plan prevé colocar 278 dispositivos (20 a la semana). En la Malvarrosa, una actuación urbanística despejó una de las zonas más conflictivas de las Casitas Rosa.
Pisos turísticos
La principal medida de Catalá ante la proliferación de apartamentos turísticos por prácticamente todos los barrios de la ciudad ha sido la aprobación de una moratoria de un año en la concesión de licencias para los que se encuentren en edificios residenciales. Además, prevé consensuar con la Autoridad Portuaria el veto a los megacruceros en Valencia a partir de 2026 al entender que no aportan un turismo de calidad.
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