Thomas Kingston, de 45 años, fue encontrado muerto, el pasado marzo, en la mansión inglesa de sus padres con un arma cerca y un disparo en la cabeza. El aristócrata estaba casado con Lady Gabriella Windsor, de 43, pariente cercanísima del rey Carlos de Inglaterra y a la que toda la familia real británica ha arropado en estos duros meses.

Gabriella, licenciada en Literatura y escritora, a quien la familia llama Ella, se refugió en casa de sus padres, la princesa Cristina y el príncipe Miguel de Kent, descendiente del rey Jorge, padre de la reina Isabel II. El monarca era bisabuelo de Ella.

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Cuatro meses después de la tragedia familiar, Gabriella ha reaparecido dejando el luto por el estallido de color de las pamelas de la carrera de caballos, donde los sombreros importan más que los resultados.

Lo ha hecho pegada al rey Carlos y a su esposa, Camila, en el carruaje que iba justo detrás del de ellos, junto a Ana de Inglaterra, hermana del rey.

Europa Press

Gabriella llevaba un vestido de flores en alegres tonos rosas y un sombrero a la par de lo que se pide en el dress code de este acontecimiento, aunque algo más discreto que los que suelen predominar en esta cita: enormes, llenos de adornos, flores, accesorios inimaginables, como chuches y de vistosísimos colores.

La prima de Guillermo y Harry y sobrina del rey, Zara Phillips, la ha saludado efusivamente nada más verla. Carlos y Camila han tratado de que la joven supere la desgracia desde la discreción y el afecto.

NEIL HALL/AP