La Audiencia de Barcelona juzga este miércoles al mediodía a un auxiliar de enfermería, ahora en prisión provisional, que trabajaba en el área de psiquiatría del Hospital Sant Rafael de la Congregación de Hermanas Hospitalarias del Sagrado Corazón y que presuntamente abusó de dos pacientes.
El juicio se celebra a puerta cerrada dada la vulnerabilidad de las víctimas, y la Fiscalía reclama una condena de 18 años de cárcel mientras que la defensa confía en la absolución del acusado.
Una de las víctimas tiene un trastorno límite de la personalidad y una discapacidad del 65%, de quien el acusado presuntamente abusó al menos tres veces en el baño de la habitación hospitalaria.
La segunda víctima, que estuvo ingresada durante unos 10 días por una depresión, le dio su teléfono al acusado después de que él, "aprovechando su situación de vulnerabilidad, le realizaba halagos, le acariciaba el pelo, le regalaba bombones y el último día del ingreso le dio un beso en la boca".
Cuando la joven ya tenía el alta, el acusado contactó con ella y se presentó en su casa con la excusa de entregarle un libro, y presuntamente abusó de ella en su coche.
La Fiscalía también exige una indemnización por daños morales de 120.000 euros para una mujer y de 80.000 euros para la otra, de los que señala como responsable civil al seguro del centro médico y como responsable civil subsidiario al hospital.
El hombre está en prisión provisional desde el 15 de julio de 2022, por lo que en algo más de un mes cumplirá los dos años máximos de prisión preventiva a menos que el tribunal apruebe prorrogarlo.
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