El pasado 12 de junio, Bertín Osborne lanzó un comunicado reconociendo públicamente que es el padre del hijo de Gabriela Guillén. A pesar de ello, la demanda de paternidad que la fisioterapeuta impuso contra el artista sigue adelante. Así, Guillén y el bebé han tenido que hacerse unos análisis para reconfirmar que es hijo del cantante.
Pero, ¿qué habría detrás de este comunicado? Según Lecturas, un pacto entre ambos. Tal y como explica la revista, la batalla que el artista mantenía con Gabriela Guillén afectaba a su imagen del cantante, que pasa por una complicada situación económica, ya que tiene una deuda con Hacienda de casi medio millón de euros y una hipoteca de 4,5 millones. Por eso, llegar a un acuerdo con ella era la mejor opción.
Según titula la publicación, tanto el patrimonio de Bertín como la herencia de sus hijos están hipotecados. En detalle, su finca sevillana, donde grabó Mi casa es la tuya, está hipotecada por más de 4 millones.
Según la misma información, la finca no se podrá vender hasta que se satisfaga. Así que, lejos de jubilarse, el artista, de 69 años, necesita trabajar para mantener su fortuna y ha decidido acercar posturas con Gabriela y mejorar una imagen dañada los últimos meses.
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