Sobrevivir al verano en las grandes ciudades y regiones calurosas del país es, cada vez más -a causa del cambio climático- todo un reto para quienes no tienen los recursos económicos necesarios para mantener el aire acondicionado encendido durante horas. 

Por eso, en los días de calor asfixiante es importante conocer y aplicar algunos trucos para refrescar nuestra vivienda. Te damos 8 consejos para refrescar la casa en la época estival:

1. Ventila en estos momentos concretos

Para evitar que se cuele el calor del sol, en verano es importante mantener durante todo el día las ventanas cerradas hasta el momento en el que caiga el Sol, y al amanecer, que serán los mejores momentos para abrir las puertas y ventanas de par en par.  

Además, si creas corrientes de aire conseguirás tener la casa fresca, aunque durante un tiempo, al menos suficiente para que puedas conciliar el sueño en las noches tropicales..

2. Adiós al aire caliente con el extractor

Mientras estés cocinando, enciende el extractor para que salga el aire caliente, y evita usar el horno estos días. Además, si optas por platos frescos evitarás encender los fuegos. Haz lo mismo cuando te duches, encendiendo el extractor del baño. 

4. Cambia las bombillas

Las bombillas incandescentes gastan un 90% de su energía en el calor que emiten, así que deshacerte de ellas y cambiarlas por luz LED o de bajo consumo será un buen truco para disminuir las fuentes de calor en casa y además ahorrar.

5. Lava por las noches

Todos los electrodomésticos, incluido el televisor, son fuentes de calor que debemos evitar en la medida de lo posible y desconectar cuando no se estén utilizando. Un consejo útil es evitar poner el lavavajillas y la lavadora durante el día, ya que desprenden mucho calor. 

6. Hielo frente al ventilador

Coloca recipientes con hielo o agua fría frente a los ventiladores para que el aire se enfríe al pasar por ellos y te llegue más fresco si sientes que el aire que mueven las aspas es muy caliente.

7. Barreras naturales en la fachada

Las enredaderas o buganvillas son una buena opción sobre la fachada de las casas para que actúen de barrera natural frente al calor. 

8. Pon láminas solares en los cristales

Estas láminas son una solución efectiva que refleja la luz y el calor que entra por las ventanas. Además, tienen la ventaja de que no necesitas quitar el cristal para ellos: reducirán el calor en un 82%.