Suspenden el decomiso de Charlie, un cocodrilo enano que vive en una tienda de animales de Toledo

Charlie, el cocodrilo enano que habita en una tienda de animales en Torrijos, Toledo, iba a ser decomisado en aplicación de la ley de protección de los derechos y el bienestar de los animales este jueves. Ante esto, los representantes de la Federación Fauna han acudido al lugar a protestar por ello. Finalmente, los agentes del Seprona se han marchado sin acceder a la tienda y no se han llevado al animal. Fuentes próximas a la investigación, asimismo, han recalcado que ya se habían decomisado animales anteriormente en el mismo establecimiento.

Fran Torres, el propietario de la tienda de animales, ha explicado a los periodistas que el cocodrilo pertenece a la especie Osteolaemustetraspis, conocido por ser el más pequeño del mundo, y lleva nueve años bajo su cuidado. El animal mide 1,40 metros, pesa más de dos kilos y pueden llegar a vivir entre 40 y 45 años, o alguno más en cautividad.

El dueño ha explicado que su intención es que el animal se quede intervenido en su tienda, bajo responsabilidad. El hombre ha mencionado que el cocodrilo es su mascota y si se lo llevan "va a morir" porque no tendrá los cuidados que él le da. "Aquí está en un estanque de cuatro por tres metros. Está mejor que en cualquier centro de recuperación", ha añadido.  

Según ha comentado el hombre, los agentes contaban con una lista de hasta una veintena de sus animales, incluidas otras especies como serpientes o geckos, aunque no le han especificado cuáles iban a decomisarle. "Como persona imputada en esto tengo ese mínimo derecho a que me digan qué animales son los que quieren. Mi cocodrilo es mi mascota, llevo nueve años con él y tener que entregarlo a unas autoridades sin que me den ningún tipo de razón...", ha señalado Torres.

Incertidumbre

A pesar de todo, la situación continúa siendo de incertidumbre para  Charlie y Fran, ya que el proceso sigue su curso. El hombre no sabe si se le denunciará por desacato, aunque ha reiterado que no ha impedido a los agentes entrar al lugar en el que se encontraba el cocodrilo. "En ningún momento han querido hablar con nosotros ni entrar en razón. Ni siquiera nos han dicho qué animales se querían llevar. Es mi mascota", ha razonado.

La ley de protección de los derechos y el bienestar de los animales prohíbe tener reptiles que superen los dos kilos de peso, como es el caso del cocodrilo enano de Torres. Al respecto, Luis Olmedo, miembro de la directiva de la Federación Fauna, ha dicho que a fecha 29 de marzo de este año ninguna persona se había autodenunciado por tener reptiles de más de dos kilogramos, como recoge la normativa.

Olmedo ha criticado la ley ya que "no hay por donde cogerla" y ha dicho que en la Federación Fauna "sí pensamos que es necesaria una ley que regule el bienestar de los animales, pero esta ley no va del bienestar animal, habla de derechos, de dignidad y poco más. No es una ley clara", ha manifestado. Por su parte, la abogada Rosa Díez, que ha asistido al dueño de los animales, ha hablado de irregularidades en el procedimiento administrativo ya que, según ha dicho, a Torres no le han notificado los preceptos que ha vulnerado y en todo caso se le tiene que dar un plazo para hacer alegaciones y resolverlas.

Olmedo también ha hablado de que la inspección que se realizó en su momento, y que ha dado lugar al decomiso no llevado a cabo este jueves, fue "irregular" y "anormal". El dueño del cocodrilo enano ha recalcado que "la única forma" de que el animal "esté bien" es que se quede en sus instalaciones y ha defendido que su centro está autorizado.