El llamado síndrome del impostor es un fenómeno psicológico que afecta a individuos que, a pesar de lograr éxitos y reconocimientos evidentes, dudan de su propia competencia y sienten que no merecen sus logros.

El problema es que las personas que lo sufren no siempre son conscientes de ello. La revista Best Life ha publicado un reportaje en el que detalla cinco síntomas de que lo podrías estar manifestando.

Trabajas demasiado

El primer síntoma es que trabajes demasiado. La psicóloga Merry C. Lin dice: "Podemos terminar en esta danza de sobrefuncionamiento para compensar las brechas que vemos a nuestro alrededor, porque esas brechas pueden afectar nuestra reputación como personas de alto rendimiento".

La clave para evitarlo es "dar un paso atrás y hacernos preguntas antes de actuar (¿De dónde viene esta ansiedad? ¿Por qué intento controlar la situación?)", lo que según Lin, conseguirá que nos "volvamos más conscientes de con qué frecuencia funcionamos en exceso".

Te preparas en exceso

Un segundo síntoma es el exceso de preparación. "Muchos clientes que acuden a mí tienen antecedentes muy relevantes y calificaciones claras para los roles que desempeñan", dice Stephen Greet , director ejecutivo y cofundador de BeamJobs. "Sin embargo, el síndrome del impostor les hace pensar que necesitan pasar semanas o meses preparándose intensamente sólo para tener una oportunidad", agrega.

"Mi objetivo al trabajar con estas personas es ayudarlos a cambiar su perspectiva de las dudas negativas sobre sí mismos a una visión precisa de sus verdaderas calificaciones y experiencia", dice Greet.

Te obsesionas por superarte

El tercer síntoma es la obsesión por superarse. "El impulso interminable se apodera de la mente, el estilo de vida y, por tanto, la paz", dice el doctor Herman Sjr. La solución es "identificar el ciclo de superación para enmascarar sentimientos de insuficiencia y otras emociones negativas".

No reconoces tus logros

El cuarto síntoma es no reconocer tus logros. "Uno de los mayores indicadores del síndrome del impostor es la dificultad para internalizar tus logros", dice el coach Kyle Elliott. "Esto podría parecer como recibir un elogio o un elogio por algo que hiciste en el trabajo, pero atribuirlo al azar o a la suerte", añade.

La manera de solucionarlo es aprender a internalizar tus éxitos laborales, lo que requiere documentar tus experiencias.

Te preocupas demasiado por los demás

El último síntoma es estar demasiado preocupado por los demás. Si asumes la responsabilidad de quienes te rodean, cueste lo que cueste, "es entonces cuando sabes que estás viviendo mucho más allá de tus límites, y eso es lo único que sientes que te mantiene funcionando como una superestrella", dice Merry C. Lin. Para evitarlo, es necesario aprender a dejarse llevar y tolerar la incomodidad.