Noche trágica en Cataluña, que termina con cuatro fallecidos durante las celebraciones de la verbena de Sant Joan. Tres de ellas se investigan como muertes violentas, mientras que la cuarta se trata de un hombre que se ahogó en Sitges (Barcelona) al tratar de ayudar a un grupo que no podía salir del mar.
El Govern ha detallado que, durante la noche se detuvieron a 55 personas y se registraron 7.406 llamadas al teléfono de emergencias 112 por 4.566 incidentes. En cuanto a comarcas, la que concentró más avisos fue la del Barcelonès, con 3.055, seguida del Vallès Occidental (639), el Maresme (547) y el Baix Llobregat (526).
Por otro lado, los bomberos han tenido que realizar entre las ocho de la noche y las ocho de la mañana de este lunes 833 servicios. La mayoría han sido a causa de incendios urbanos (505), mientras que 187 han sido por incendios de vegetación. El gobierno catalán también ha destacado que no ha habido ninguna víctima mortal en las carreteras.
Los Mossos d’Esquadra han abierto una investigación para esclarecer la muerte de dos personas, un hombre de 48 años y una mujer de 44, en el barrio de Font de la Pólvora, en Girona. Según los primeros indicios, sobre las 22:35 horas, una discusión entre dos mujeres inició una batalla entre familias que acabó en un tiroteo. No obstante, la mujer falleció a causa de un atropello y el hombre, por heridas de gravedad.
Ambas víctimas fueron trasladadas al Hospital Josep Trueta de la ciudad, pero los médicos no pudieron hacer nada para salvarles la vida. En las puertas del centro sanitario se vivieron momentos de tensión cuando personas del entorno de los fallecidos protagonizaron una batalla campal contra los Mossos por no permitirles acceder al recinto. Ante estos hechos, la policía catalana tuvo que activar un amplio dispositivo de orden público en el hospital para evitar desórdenes públicos.
Durante el enfrentamiento también resultaron heridas de gravedad otras dos personas. Los Mossos siguen buscando al autor de los hechos y sospechan que podría haber huido a Granada acompañado de otras personas. Asimismo, creen que podría ser un traficante de armas conocido por el cuerpo policial. No obstante, tampoco descartan que el sospechoso haya huido al Alt Empordà, donde se le habría visto la misma noche de los incidentes.
Este lunes y horas después del suceso, decenas de familiares y amigos de las víctimas han acudido a la vivienda del sospechoso y su familia en el barrio de Vila-roja, también Girona, para destrozarla. Entre gritos de "asesino" y con bates y picos, el clan de los Tomates ha barrido el interior de la casa ante la mirada de los vecinos, que observaban desde fuera lo que estaba ocurriendo.
El Ayuntamiento de la ciudad ha convocado una junta local de seguridad que se hará misma semana a raíz del doble crimen. Además, el consistorio ha decretado dos días de luto oficial y ha vuelto a condenar los hechos que "no se tienen que volver a repetir". El alcalde, Lluc Salellas, ha pedido "serenidad y calma" y ha reconocido que "hay que seguir trabajando en el barrio para ayudar a que no se vuelva a producir nunca más".
"Esto no se soluciona solo con discursos, sino que se hace con acciones concretas y por eso ya hemos convocado reuniones para empezarlo a hacer", ha señalado Salellas, que ha confirmado que una de las víctimas es una trabajadora municipal que hace de cocinera en el centro de acogida La Sopa.
Degollado en la Barceloneta
El teniente de alcalde de Seguridad del Ayuntamiento de Barcelona, Albert Batlle, ha confirmado este lunes la muerte de un joven de 26 años tras ser degollado en el Passeig Joan de Borbó en la Barceloneta. Según ha explicado ante los medios, la víctima murió en el acto y los servicios sanitarios no pudieron hacer nada por salvarle la vida.
En este caso, la Guardia Urbana sí que ha detenido a una persona presuntamente implicada en los hechos. Además, según el digital El Caso, las primeras informaciones recogidas por la policía, a falta de la investigación de la DIC de los Mossos, indican que el detenido intentó atacar a un grupo de personas y que la víctima intentó defenderlas. Tras ello, se inició un enfrentamiento entre ambos que acabó con la vida del joven de 26 años.
La cuarta muerte se produjo en Sitges (Barcelona), donde un hombre murió ahogado en la playa de la Rivera tras lanzarse al mar junto a otras personas para intentar ayudar a un grupo que no podía salir del agua.
Según han informado los Mossos d'Esquadra, los hechos ocurrieron pasada la medianoche, sobre la 1:00 de la madrugada.
El conseller del Interior, Joan Ignasi Elena, se ha puesto en contacto con los alcaldes de Girona y Barcelona, Lluc Salellas y Jaume Collboni, respectivamente, para tratar las tres muertes violentas en los dos municipios. Asimismo, ha dado apoyo a los Mossos y a las dos policías locales.
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