Un joven de 20 años, vecino del municipio barcelonés de Sabadell, está siendo investigado como presunto autor de un delito de estafa valorado en 9.445,25 euros. El hombre intervino un correo electrónico de una empresa de Tenerife y modificó los datos bancarios de una de sus facturas para así recibir el dinero estafado.
La Guardia Civil tuvo conocimiento del hecho delictivo a través de la denuncia presentada por un representante de la empresa afectada, la cual tiene su sede en el municipio de Güímar. La compañía emitió desde su correo electrónico corporativo una factura por prestación de servicios a otra empresa. Esta fue intervenida y modificada por el joven, que cambió el número de cuenta bancaria donde se debía realizar el abono de 9.445,25 euros.
La factura, posteriormente, fue reenviada a la empresa pagadora desde una cuenta de correo electrónica falsa, muy parecida a la legítima. Finalmente, el abono de la citada cantidad, se realizó en una cuenta bancaria titularidad del acusado.
Tras la investigación realizada por los agentes de la Guardia Civil se ha logrado detectar el método de estafa empleado, más conocido como BEC (Business Email Compromise). Este método consiste en que el ciberdelincuente realiza el estudio de una empresa mediante técnicas de ingeniería social con las cuales se logra acceder a la cadena de comunicación del propio email. El objetivo es modificar esa cuenta de correo para así conseguir desviar el dinero hasta la cuenta bancaria del estafador.
Una vez que los agentes de la Guardia Civil realizaron las gestiones oportunas y pudieron comprobar y corroborar los hechos delictivos, procedieron a la localización e investigación del joven como presunto autor de un delito de estafa. Este operativo ha contado con el apoyo de los agentes de Barcelona, ya que el investigado residía en esa ciudad. Las diligencias instruidas han sido remitidas al Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2 de Güímar y Fiscalía de Delitos Telemáticos de Santa Cruz de Tenerife.
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