El ministro para la Transformación Digital y de la Función Pública, José Luis Escrivá, ha defendido este miércoles el sistema de verificación de edad para impedir el acceso de menores a webs de contenido pornográfico, después de las críticas vertidas en redes sociales al respecto. Escrivá ha subrayado que con la app se prima la protección de los menores ante lo que considera un "grave problema", al tiempo que ha asegurado que el sistema garantizará el "anonimato" de los usuarios mayores de edad.

Primero en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros y luego en su perfil de redes sociales, el ministro ha asegurado que el sistema de verificación de edad "es muy cómodo, muy fácil y no va a generar ningún problema". "Lo único que estamos pidiendo a los adultos es un pequeñín esfuerzo de que se identifiquen con un sistema que es muy fácil", ha señalado.

El Gobierno prevé que a finales de verano esté lista la primera versión de 'Cartera Digital Beta', la aplicación móvil que incorporará un sistema de verificación de edad para que los menores no accedan a contenidos para adultos como la pornografía. En esta app, el usuario solicitará su credencial como persona mayor de edad, para lo cual el sistema comprobará su identidad mediante el DNI electrónico o cualquier otro registro administrativo. Una vez confirmado que se trata de una persona mayor de 18 años, la herramienta emitirá un pack de 30 credenciales.

Escrivá ha detallado que se trata de un procedimiento de verificación de la edad que "protege completamente el anonimato de aquel que se está identificando", pero que tiene como resultado que solamente aquellos que son adultos accedan a determinadas páginas etiquetadas como pornográficas.

"Como todo en la vida, hay que equilibrar distintos principios y el principio superior de protección del menor en un contexto extraordinariamente preocupante es el que debe primar y buscar soluciones que además al mismo tiempo aseguren completamente la privacidad de las personas y sus decisiones sobre qué quieren ver o no ver", ha defendido.

El ministro ha justificado esta medida por los datos "abrumadores y extraordinariamente preocupantes" de que el acceso promedio a contenidos pornográficos de los menores es de 11 años. Y además, ha alertado, "en los últimos cinco años se ha más que duplicado el número de agresiones sexuales cometidas por niños". En redes sociales, ha añadido que "el 90% de los jóvenes cree que el porno es fiel a la sexualidad real y para uno de cada tres es su única fuente de información afectivo-sexual".

"Hay una evidencia abrumadora de que esta exposición de personas en una edad muy vulnerable está generando problemas psicológicos, problemas de salud mental, problemas de afectividad muy serios. Es un tema enormemente preocupante y en ese contexto hemos llegado a la conclusión de que algo que se puede hacer ya y que es útil y eficaz", ha concluido Escrivá.