El acusado de agredir sexualmente de dos menores que había conocido a través de Instagram en Caldes de Malavella, en Girona, se enfrenta a 28 años de cárcel. La fiscalía sostiene que quedó con las víctimas en la estación de tren y que las atacó la tarde del 9 de enero del 2019. La Audiencia de Girona había fijado el juicio este martes, pero el procesado no se ha presentado.
El abogado de la defensa argumentó que el acusado tiene asignadas medidas de apoyo para gestionar su patrimonio y su vida cotidiana. Por eso, ya petición de la fiscalía, la sección tercera ha acordado que los forenses dictaminen si tiene preservadas sus capacidades cognitivas y volitivas para enfrentarse al proceso judicial. La vista ha quedado suspendida.
Las víctimas tenían 14 años
Según recoge el escrito de acusación de la fiscalía, el procesado, que entonces tenía 18 años, conoció a las menores a través de Instagram. Hacia las cuatro de la tarde, quedó con una de las víctimas en la zona de la estación de tren. La menor tenía 14 años.
La acusación pública expone que, siendo "plenamente consciente de la edad de la menor", fueron hasta la parte trasera de la estación y, una vez allí, la empezó a besar e hizo que se sentara en su regazo.
Luego, la llevó hasta una zona de aparcamiento cercana y, sujetándola para impedir que pudiera huir, le hizo tocamientos íntimos y le introdujo varios dedos en los genitales, sin hacer caso a la "clara oposición" de la menor.
Como la víctima se resistía, el procesado le cogió una mano y le obligó a masturbarle. La menor logró deshacerse del agresor pero, cuando ya se marchaba del lugar, él la empujó y la hizo caer al suelo, sin que consten lesiones físicas.
Poco rato después, el acusado y la primera víctima fueron a encontrar a la otra menor, también de 14 años. Los tres, se dirigieron a una zona conocida como 'la cúpula'. El procesado, siguiendo el mismo 'modus operandi', empezó a besar a la menor y le hizo tocamientos.
A esta segunda víctima también la mandó hasta un lugar más apartado, le bajó los pantalones y, sujetándola "con fuerza" para anular su capacidad de resistencia, la violó.
Como consecuencia del ataque, la menor sufrió un trastorno adaptativo con clínica ansiosa y tuvo que recibir tratamiento psicológico y farmacológico.
La fiscalía achaca al acusado dos delitos de agresión sexual con acceso carnal y un delito de maltrato de obra y solicita una condena de 28 años de cárcel y multa de 480 euros. También pide 10 años de libertad vigilada, que no pueda acercarse ni comunicarse con las víctimas durante 10 años y que las indemnice con 20.000 euros.
La defensa niega los hechos y pide la absolución
La sección tercera de la Audiencia de Girona había fijado el juicio para este martes, pero ha tenido que suspenderse porque el acusado no se ha presentado. Además, su abogado ha esgrimido una resolución judicial que acuerda medidas de apoyo para el procesado para desarrollar su vida cotidiana, tanto a nivel de gestión de patrimonio, como de tratamiento médico o alimentación e higiene.
A raíz de ello, la fiscalía ha pedido al tribunal que acuerde que, una vez localicen al procesado, los forenses lo exploren para determinar si tiene las capacidades volitivas y cognitivas preservadas y que es capaz de enfrentarse al procedimiento judicial, comprendiendo la acusación y las posibles consecuencias.
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