El alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, ha recibido este miércoles al alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, en su primera visita institucional al Ayuntamiento de Barcelona. En su encuentro, que ha durado unos 45 minutos, han exhibido "normalidad institucional" entre las dos capitales y han abordado "retos compartidos" como son el "acceso a la vivienda, la gestión turística, el reto climático o la movilidad", ha explicado Collboni en una atención a los medios tras su encuentro.
También ha habido un intercambio de "información jurídico-técnica" para la modificación de leyes del régimen especial de las dos ciudades para tener más competencia y financiación. "Son competencia estatal y que se tendrá que tramitar en su día en las cortes generales", ha dicho el alcalde de Barcelona. Además, ha explicado que el camino de las dos reformas "serán diferentes porque tenemos realidades diferentes", pero ha insistido en la necesidad de "cooperar".
Por otro lado, ha destacado el intercambio de información sobre la elaboración de "un protocolo de colaboración entre las ciudades de Barcelona y de Madrid respecto a la aplicación de conocimiento, gestión de datos y aplicaciones tecnológicas para la gestión de las ciudades". Así ha referido a los trabajos que se están haciendo en Barcelona, como el modelo de gemelos digitales, que permite realizar pruebas piloto para ver cómo afectarían a la ciudad. "Es un protocolo que se tiene que ultimar en los próximos meses", ha dicho.
Necesidad de "cooperación"
Los dos alcaldes han destacado la necesidad de "cooperar" en ámbitos de interés mutuo. "Podemos ayudarnos e intercambiar información", ha dicho Collboni. Por su parte, Almeida ha agradecido la invitación y ha dicho que en política "es importante que los ciudadanos vean que las ciudades de Madrid y de Barcelona podemos colaborar, cooperar y buscar soluciones a sus problemas comunes", ha sostenido.
Previamente al encuentro, Almeida ha firmado el libro de visitas del Ayuntamiento y ha entregado una figura a Collboni de una 'menina'. A su vez, el alcalde barcelonés ha entregado a Almeida un azulejo del Paseo de Gracia. La última vez en la que un alcalde o alcaldesa de la capital visitó el consistorio barcelonés fue Manuela Carmena en febrero de 2018.
Pisos turísticos
Tanto el Ayuntamiento de Barcelona como el de Madrid están preparando una regulación de los pisos turísticos para abordar esta problemática en las dos ciudades. Almeida se ha mostrado partidario a una regulación en Madrid que no vaya "en contra del turismo", mientras que Collboni ha reiterado su voluntad de suprimir la vivienda destinada al uso turístico. En 2028 no se renovarán las licencias y a partir de 2029 no habrá pisos turísticos en la capital catalana.
Fiscalidad
Por otro lado, en el coloquio 'Dos ciudades de vanguardia' de 'La Vanguardia' y EY, que se ha celebrado posteriormente a la visita en el Ayuntamiento, el alcalde de Barcelona ha abogado por un sistema fiscal "fuerte" mientras que el alcalde de Madrid ha defendido no subir impuestos.
Almeida ha destacado que subir los impuestos en la capital "no genera automáticamente que haya un aumento de actividad económica, en todo caso un decrecimiento". El alcalde popular ha aclarado que desde el gobierno municipal no hacen 'dumping fiscal' sino que, textualmente, aprovechan el marco del Estado Constitucional y del Estado de las autonomías para tomar decisiones de carácter fiscal. Con todo, ha considerado que la capital española ha ejecutado mejores políticas fiscales que Barcelona y Cataluña: "Tenemos una receta que no es solo impuestos bajos y competitividad fiscal, va mucho más allá".
Sin embargo, Collboni ha apostado un sistema fiscal fuerte porque defiende un sistema del bienestar también fuerte, y un sistema de redistribución de la riqueza que es "perfectamente compatible con la competitividad y con tener un tejido productivo dinámico y vibrante". El primer edil catalán señalado que está "en contra de que los marcos legislativos españoles y europeos permitan que haya competitividad a la baja en el sistema fiscal" porque, a su juicio, va en detrimento de los servicios públicos y del sistema del bienestar del país y de los países de la Unión Europea.
Competencias en seguridad
Tanto Almeida como Collboni han situado el fenómeno de la multirreincidencia como un problema para abordar en sus ciudades, aunque han señalado a administraciones superiores como los máximos responsables de esas competencias: a la Generalitat en Catalunya, y al Gobierno en el caso de Madrid.
Almeida ha dicho que los temas de la seguridad y la convivencia son comunes en todas las grandes ciudades, por lo que ha pedido mecanismos específicos en grandes urbes para que haya recursos suficientes en esa materia, poniendo como ejemplo la dificultad de cubrir una veintena de plazas de la policía local de Madrid por normativas supramunicipales.
El alcalde de Madrid ha matizado que su ejecutivo no aspira a tener más competencias en seguridad, pero ha remarcado la necesidad de tener una mayor cooperación entre la policía local y los cuerpos de seguridad del Estado, ampliando las funciones de los agentes del Ayuntamiento para que hagan actuaciones más eficaces.
Collboni ha coincidido en que se debería aumentar la cooperación entre cuerpos y ha reiterado la obligación de los gobiernos municipales de instar a administraciones superiores a actuar porque, a su juicio, los ciudadanos a quien rendirán cuentas de la seguridad será a los ayuntamientos, que son las instituciones más cercanas a la ciudadanía.
Con ello, el alcalde socialista ha reivindicado el consenso que se ha formado entre los grupos municipales de Barcelona para pedir una reforma del código penal a nivel estatal y la ampliación de la planta judicial de Barcelona y Cataluña ante el aumento de los delitos a gestionar en los juzgados.
Collboni insta al Govern a invertir en vivienda
En el mismo acto, Collboni ha destacado que la "prioridad número uno" del Ayuntamiento de Barcelona es el acceso a la vivienda y ha instado al próximo Govern de la Generalitat a "ejercer sus competencias e invertir en vivienda protegida" en la capital catalana.
El alcalde ha afirmado que en el ámbito regulatorio la competencia de vivienda corresponde a las comunidades autónomas "fundamentalmente", por lo que el consistorio tiene como misión, ha dicho, facilitar que haya más oferta de vivienda pública y privada.
Sin embargo, ha criticado el hecho de que actualmente entre la decisión de hacer una promoción de vivienda pública y dar una llave pasan en torno a cinco o seis años, lo que ha tildado de "barbaridad" y ha dicho que su voluntad es reducir plazos y algunos trámites que se podrían modificar haciendo modificaciones puntuales de la legislación.
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