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El plan de Buckingham Palace para que se olvide la supuesta infidelidad del príncipe Guillermo

Rose Hanbury, el príncipe Guillermo y Kate Middleton, en imágenes de archivo.
Getty Images

Su nombre desapareció de la primera línea periodística en cuanto Kate Middleton desapareció del foco mediático a principios de año. Aunque unos meses más tarde se supo que se trataba de un cáncer, se había llegado a especular incluso que podía tratarse de un ultimátum de la princesa de Gales a su esposo, el príncipe Guillermo de Inglaterra, por su supuesta infidelidad con Rose Hanbury.

El nombre de la marquesa de Cholmondeley, título que ostenta Hanbury, se hizo muy conocido de la noche a la mañana, si bien igualmente desapareció de los titulares en detrimento de la enfermedad de la futura reina consorte. Una desaparición, según una reciente investigación de la prensa de la que se ha hecho eco Semana, que podría ser permanente.

Son varios los medios británicos que denuncian que se ha borrado de manera consciente cualquier rastro sobre el cacareado affair del futuro rey con la aristócrata. Desde Vulture afirman que no solo ha tenido lugar un borrado de "las acusaciones de romance extramatrimonial", sino también de cualquier alusión "a una aparente tensión entre dos amigas, Rose y Kate" o al 'Club del nabo'.

Sostienen desde el portal norteamericano que las webs que tenían referencias directas a estas cuestiones redirigen ahora o bien a la portada de inicio de la web o bien a contenido no disponible, así como que aquellas que siguen en abierto "se han actualizado después para eliminar detalles sobre la 'disputa' o los rumores" de infidelidad.

Tal y como apunta otro medio británico, The List, Buckingham Palace "podría estar generando el efecto contrario" —llamado el efecto Streisand— por esta ocultación informativa a los periodistas de su país, dado que su extraño plan solo afecta a los artículos publicados por la prensa inglesa desde hace cinco años.

Según Vulture, la idea de proteger al heredero al trono y a su esposa a toda costa ha llevado a intentar eliminar tanto los primeros rumores, que surgieron en abril de 2019 —y que llevó a la familia real británica a enviar cartas "disuasorias" a los medios, como denunció entonces el Daily Beast—, como al saberse la enfermedad de Kate hizo que resurgiesen las noticias sobre la supuesta relación de Guillermo y la aristócrata. 

Añaden desde The List que los intentos de Buckingham Palace, que describen como "desesperados", también llevaron a que la marquesa de Cholmondeley viviese una época de blanqueo, con "un impulso posterior para difundir historias positivas de Hanbury", de forma que se redujese la idea de que podía ser infiel o tener una mala relación con su otrora amiga Kate Middleton.

Aun así, desde el medio norteamericano no han dudado en calificar de inútil el plan de la familia real británica: "Es posible que la monarquía no solo quiera poner fin a los duros rumores; puede que también estén ocultando la verdad e intentando reconducir la imagen pública de Hanbury. De ser así, algo que nadie sabe con certeza, podrían estar a punto de provocar un escándalo grave en la realeza".

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