PSOE y PP unen sus votos para derribar el intento de Vox y Podemos de tumbar su reforma judicial

La reforma judicial pactada hace unas semanas por PSOE y PP como complemento a la renovación del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) sigue quemando etapas de su tramitación exprés. Este jueves, el Congreso derribó los intentos de de veto —enmiendas a la totalidad, en jerga parlamentaria— de Vox y Podemos, que forzaron el debate en la Cámara Baja de sus propias propuestas de reforma judicial. Y lo hizo con los votos de PSOE y PP, que se bastaron y sobraron para que su texto siga tramitándose sin cambios y quede ya encarrilado para su aprobación final.

El debate se desarrolló sin sorpresas y con muy pocos argumentos novedosos con respecto a la semana pasada, cuando el Congreso dio luz verde a comenzar la tramitación del texto que pactaron hace unas semanas socialistas y populares. Ambos debates, el de toma en consideración y el de este jueves, han tenido lugar tan seguidos porque los dos partidos mayoritarios han decidido acelerar lo máximo posible los tiempos para dejar la norma aprobada antes del parón estival de agosto y han utilizado la amplia mayoría que suman para ello, pese a las dudas que suscita el texto en el resto de los grupos parlamentarios.

Los habituales aliados del Gobierno se han mostrado críticos con el que, consideran, es un pacto bipartidista que les ha dejado fuera de una reforma tan relevante como la del poder judicial. Pero, de ellos, solo Podemos presentó una enmienda a la totalidad que su secretaria general, Ione Belarra, defendió este jueves asegurando que el PSOE "no puede permitirse" un acuerdo con el PP en una cuestión tan sensible cuando esta semana se ha conocido que la totalidad del grupo parlamentario de Podemos en 2016 fue investigada irregularmente por la policía política creada durante el Gobierno de Mariano Rajoy para intentar encontrar trapos sucios que perjudicasen a la formación.

"Yo creo que cualquier demócrata está viendo lo que hay en la derecha política y judicial, que cuando le das la mano, te coge el brazo, y pasa lo que pasa", denunció antes de comenzar el debate Belarra. Y, en la tribuna, la dirigente morada insistió en que el PSOE, con su pacto con el PP, está "legitimando la guerra sucia judicial y política contra Podemos y las fuerzas independentistas, y ahora también contra el presidente del Gobierno". "¿A qué policías de los que nos investigaron se va a condenar desde unos altos tribunales que van a ser nombrados por el mismo PP que nos investigó ilegalmente?", espetó Belarra.

La propuesta morada que se debatió este jueves apostaba por cambiar el sistema de elección de doce vocales del CGPJ en el Congreso, y abría la vía de elegirlos por mayoría absoluta con el concurso de la mitad de los grupos parlamentarios en el Congreso. Los morados también incluían en su enmienda a la totalidad una reforma del acceso a la carrera judicial que combinaba el actual sistema de oposición con un nuevo sistema de concurso entre abogados, y el establecimiento de un mecanismo por el cual habría que superar una oposición libre o un concurso de méritos para ingresar en la carrera judicial en la categoría de juez.

Por su parte, la enmienda a la totalidad presentada por Vox la defendió su diputado Javier Ortega Smith, que aprovechó su turno en la tribuna del Congreso para calentar el ambiente ante la reunión que mantendrá esta tarde la ejecutiva de su partido para decidir si rompe los gobiernos autonómicos que comparte con el PP. Ortega Smith criticó el acuerdo entre PSOE y PP para repartirse los vocales del CGPJ, y denunció además que ambos partidos también hayan pactado en relación a "los menas", el acrónimo de menores extranjeros no acompañados, es decir, niños y adolescentes que viven actualmente hacinados en Canarias. Por ahora, las comunidades gobernadas por el PP solo han aceptado hacerse cargo de 300 menores migrantes.

Ortega Smith también aseguró que este entendimiento entre los dos grandes partidos en lo relativo a la renovación del CGPJ revela la existencia de una "coalición PPSOE" basada en "mantener un engaño a sus votantes". "Del PSOE, que dijo que nunca gobernaría con los comunistas de las cartillas de racionamiento y con los golpistas que dieron un golpe de Estado en Cataluña, y del PP del engaño permanente que dijo que jamás pactaría con el PSOE", denunció el diputado de Vox.

La tramitación continúa

Tras el fracaso de las dos enmiendas a la totalidad, la reforma judicial seguirá su tramitación en el Congreso. El texto no es demasiado complejo: aunque no cambia automáticamente el sistema de elección de los vocales del CGPJ, el articulado sí insta al nuevo órgano de gobierno de los jueces que saldrá de este acuerdo PP-PSOE a que en los próximos seis meses desde la entrada en vigor de la ley elaboren un informe "con objeto de examinar los sistemas europeos de elección de los miembros de los consejos de la magistratura análogos al español" y, por otro, "una propuesta de reforma del sistema de elección de los vocales designados aprobada por una mayoría de tres quintos de sus vocales que garantice su independencia".

La reforma se centra también en cuestiones de regeneración. Por ejemplo, el texto instituye un régimen de incompatibilidades que prohibirá que se elija como vocal del CGPJ o como fiscal general del Estado a alguien que haya sido ministro en los cinco años anteriores a la designación, para evitar que se repita el polémico caso de la exministra de Justicia Dolores Delgado, que pasó directamente del Consejo de Ministros a la Fiscalía General hace unos años. Asimismo, los jueces que sean nombrados para un cargo político de confianza con rango de director general o inferior deberán ser declarados en la situación de "servicios especiales".