El mercado inmobiliario vuelve a terreno negativo tras el impulso experimentado en abril por el 'efecto Semana Santa'. Según los datos difundidos este lunes por el Instituto Nacional de Estadística (INE), en el quinto mes de 2024 se registraron un total de 44.013 operaciones de compraventa de viviendas, un 21,5% menos que el año pasado por las mismas fechas. Esta caída, que se produjo a las puertas de la bajada de los tipos de interés oficiales por parte del Banco Central Europeo (BCE), contrasta con el pronunciado aumento del 24% anotado en abril.
En mayo de este año se registraron 12.083 compraventas de viviendas menos que en el mismo mes de 2023. "El año pasado las compraventas presentaron un volumen inusual, ya que mayo recogió las firmas paralizadas durante las fiestas de Semana Santa que fue íntegra en abril de 2023", explica María Matos, directora de Estudios de Fotocasa, que califica el dato de este año como "una cifra estándar, en la línea de la media de compraventas de prepandemia".
El volumen total de operaciones conocido este lunes fue el más bajo para un quinto mes del año desde 2020, cuando apenas se alcanzaron las 22.652 adquisiciones en un contexto marcado por la pandemia. Si se exceptúa esa coyuntura, hay que remontarse hasta 2016 para encontrar un mes de mayo con un número de compraventas inferior al de este año. En términos mensuales, el dato de mayo de 2024 se quedó también un 17,1% por debajo las 53.091 operaciones anotadas en abril.
Con este comportamiento, el mercado inmobiliario continuó en mayo con las grandes fluctuaciones que han marcado su evolución en los últimos meses. En abril la compraventa de viviendas de disparó un 24,1% con respecto al año anterior después de haberse desplomado un 19,3% en marzo, unos altibajos que se achacaron al 'efecto Semana Santa'. El hecho de que este año los días festivos no coincidieran en el mismo mes que el año pasado -en 2024 Semana Santa cayó en la última semana de marzo y en 2023, en la primera de abril- trastocó la comparativa interanual, ya que en época de festivos el comportamiento del mercado inmobiliario se ralentiza al haber menos días hábiles para firmar compraventas.
Una vez superado ese 'efecto Semana Santa', el mercado inmobiliario sigue resintiéndose sin conseguir reeditar el ligero crecimiento interanual del 5,8% registrado en febrero tras un año completo en negativo, que invitaba a pensar en una recuperación. De hecho, el volumen de compraventas registrado en mayo es el dato mensual más reducido en lo que va de año. En enero, febrero y abril se superaron las 50.000 adquisiciones mensuales, mientras que en abril se rozaron las 45.000. En los cinco primeros meses de 2024, la adquisición de viviendas acumula una caída del 4,1% con respecto al mismo periodo de 2023. "Pese a su dinámica irregular, el mercado recuperará su actividad", valora Ferran Font, director de Estudios del portal inmobiliario pisos.com.
La caída de las compraventas en mayo se debió tanto a la caída de las operaciones sobre pisos nuevos, que disminuyeron un 14,4% interanual hasta las 9.105, como a las realizadas sobre viviendas usadas. Estas últimas bajaron un 23,2% interanual, hasta las 34.908 operaciones. Las viviendas de segunda mano también han sufrido un mayor descenso en el acumulado del año. En los cinco primeros meses se han registrado un 6% menos de operaciones de este tipo que en el mismo periodo del año pasado, mientras que las adquisiciones de viviendas nuevas han crecido un 4%. "El interés por comprar vivienda a estrenar continúa fuerte, ya que cumple con los requisitos más demandados por los compradores. Podemos encontrarnos con una grave problemática de subida de precios, si la demanda continúa tan latente", advierte la portavoz de Fotocasa.
En cómputo global, las comunidades que más compraventas registraron en mayo fueron Andalucía, Comunidad Valenciana, Cataluña y Madrid, con un 8.815, 7.418, 6.798 y 5.046 operaciones respectivamente. No obstante, la contracción del mercado inmobiliario fue generalizada en todo el territorio nacional. Asturias, Andalucía y Cataluña fueron las regiones que anotaron las caídas interanuales más abultadas en el número de compraventas, de entre un 25,8% y 24,5% con respecto a mayo de 2023.
A la espera del punto de inflexión
El sector inmobiliario confía en que en los próximos meses se revierta la contracción de las compraventas con la bajada de tipos del Banco Central Europeo (BCE) como punto de inflexión. "La tendencia prevista es que haya un comportamiento hacia la estabilización en el primer semestre del año y una probable mayor actividad de cara a la segunda parte impulsada por la desescalada de tipos de interés", vaticina la directora de Estudios de Fotocasa. "La demanda de adquisición se sitúa por encima de las cifras de prepandemia, por lo que las subidas de tipos no han congelado la demanda latente", añade.
La autoridad monetaria acometió la primera bajada de los tipos de interés oficiales en junio, casi dos años después de que empezara a subirlos allá por julio de 2022 para tratar de contener la inflación. Aunque se espera que la desescalada sea más lenta que la subida, se espera que este giro de timón por parte de la institución presidida por Christine Lagarde relaje las condiciones de acceso a financiación, lo cual podría estimular la firma de hipotecas y, con ello, la compraventa de viviendas. "Si los pronósticos de desescalada de tipos de interés se cumplen, volveremos a ver cómo el acceso a la vivienda mejora al rebajarse las condiciones de acceso al crédito hipotecario y cómo la demanda que se mantenía a la espera volverá al mercado con fuerza", explica Matos.
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