Científicos consiguen predecir uno de los fenómenos más impredecibles y peligrosos del mar

Imagina estar en medio del océano, disfrutando de un viaje relajado en barco cuando, de repente, una ola gigante tres veces más alta que tu embarcación, surge de la nada y te golpea con toda su fuerza. Se trata de un escenario aterrador que, hasta ahora, era prácticamente impredecible.

Un equipo de investigadores de la Universidad de Maryland ha desarrollado una ingeniosa herramienta capaz de predecir la aparición de estas olas gigantes con hasta 5 minutos de antelación.

Cómo funciona el 'detector' de olas gigantes

Este ingenioso invento, desarrollado por Thomas Breunung y Balakumar Balachandran, está basado en una red neuronal entrenada y capaz de distinguir las olas oceánicas que son seguidas de olas gigantes. Los científicos entrenaron la red neuronal con 14 millones de datos de muestras de 30 minutos de duración de mediciones de elevación de la superficie del mar de 172 boyas. Así, han conseguido detectar la formación de olas gigantes con un margen de tiempo pequeño, pero suficiente para que los barcos y plataformas petrolíferas puedan tomar medidas para minimizar el impacto de estas colosales olas.

"Este sistema podría ser un gran aliado para la seguridad en el mar", explica Thomas Breunung, uno de los autores del estudio. "Permitiría a los barcos y plataformas petrolíferas recibir avisos tempranos y tomar medidas para minimizar los daños, como buscar refugio o realizar maniobras evasivas".

Las pruebas realizadas han demostrado que el sistema es capaz de predecir con un 75% de precisión la aparición de olas gigantes con un minuto de antelación, y con un 73% de precisión con cinco minutos de antelación. Un margen de éxito considerable que abre un abanico de posibilidades para mejorar la seguridad en el mar.

Los investigadores creen que la herramienta podría perfeccionarse aún más incorporando datos adicionales como la profundidad del agua, la velocidad del viento o la ubicación de las olas. Esto permitiría no solo predecir la llegada de las olas gigantes, sino también su altura e incluso el momento exacto en que romperán.

Sin duda, un avance importantísimo que puede salvar vidas y reducir los daños materiales que estas gigantescas olas provocan.