La futura desalinizadora provisional del Port de Barcelona se contratará mediante un contrato de servicios que durará al menos hasta 2030 y podría no ser flotante, como se preveía, sino anclada al fondo del puerto. Se prevé adjudicar el suministro en enero del año que viene y que entre en funcionamiento como muy tarde en abril, justo antes de una posible fase de emergencia 2. Aportará unos 14 hectómetros cúbicos anuales hasta que ya funcionen las futuras desalinizadoras estables del Foix y la Tordera, que aportarán 90 hectómetros cúbicos anuales.
El director del Ente de Abastecimiento de Aigua Ter-Llobregat (ATL), David Vila, ha recordado que las lluvias de esta primavera han hecho salir al área de Barcelona de la fase de excepcionalidad y esto ha provocado que no se pueda contratar por vía de urgencia la construcción de la desalinizadora flotante de emergencia, que tenía que entrar en funcionamiento en octubre. Como que se tiene que hacer una contratación ordinaria, la ATL ha preferido hacer un contrato de servicios por el cual la adjudicataria decide como hacer la obra y se le paga solo el suministro del agua, por el cual se pactará el precio, que puede variar en función de la producción. Esto también permitirá que la planta funcione antes de volver a entrar, si fuera el caso, en fase de emergencia 2. Se adjudicará en enero del 2025 y se prevé que en tres meses ya funcione.
El ATL solo pondrá de condición técnica la ubicación, en el muelle de la energía, y la producción máxima de 40.000 metros cúbicos diarios, 14 hectómetros cúbicos anuales, que es la capacidad máxima de las cañerías de evacuación existentes. La adjudicataria decidirá si se hace una plataforma flotante o ancladas al fondo marino.
La instalación funcionará al menos hasta que empiecen a trabajar las dos futuras desalinizadoras con las que contará Cataluña: la del Foix, entre las áreas de Barcelona y Tarragona, y la de la Tordera 2, entre las áreas de Girona y Barcelona. El contrato será de un mínimo de cinco años y se prorrogará hasta que haga falta.
Se prevé que la de la Tordera se licite en octubre con un coste de 290 millones de euros, funcione en 2028 y aporte 60 hectómetros cúbicos al año; y la del Foix se tendría que licitar entre mayo y octubre de 2025 por unos 223 millones de euros y se tendría que estrenar en 2029, aportando 30 hectómetros cúbicos anuales.
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