Tras el anuncio de su retirada, Biden ha anunciado su respaldo a la vicepresidenta Kamala Harris para convertirse en la nueva candidata demócrata para las elecciones presidenciales del próximo mes de noviembre. De ser así, Harris, que se convertía en 2021 en la primera mujer, la primera negra y la primera sudasiática estadounidense en ocupar el cargo, podría hacer de nuevo historia en Estados Unidos al ser la primera mujer presidenta del país.
Un hogar migrante y académico
Nacida el 20 de octubre de 1964 en Oakland, California, Kamala Devi Harris es hija de una familia migrante. Su padre, de origen jamaicano, fue profesor de Economía en la Universidad de Stanford y su madre, de origen indio, fue una reconocida investigadora del cáncer de mama que emigró a Estados Unidos desde Madrás en 1960.
Kamala Harris se licenció en Ciencias Políticas y Economía en la Universidad Howard de Washington y en Derecho por la Universidad de Harvard, y allí comenzó a dar sus primeros pasos en la política: fue elegida para el consejo estudiantil de artes liberales como representante de la clase del primer año, fue miembro del equipo de debate y se unió a la hermandad afroamericana Alpha Kappa Alpha.
De fiscal general a senadora: los éxitos de Kamala
Harris comenzó a trabajar en la Oficina del Fiscal del Distrito del condado de Alameda en 1990, donde se especializó en casos de agresión sexual infantil. Pocos años después, en 2004, se convirtió en fiscal del distrito de San Francisco, donde fue líder nacional del movimiento por los derechos LGBTQ+.
En 2010 fue elegida fiscal general de California, donde supervisó el departamento de justicia estatal más grande de EEUU. Entre algunos de sus méritos durante esta etapa, logró un acuerdo de 20.000 millones de dólares para los californianos, cuyas casas habían sido embargadas y defendió la Ley de Atención Médica Asequible en los tribunales.
Su carrera política comenzaría en 2016 como senadora demócrata con el apoyo de líderes del partido como Biden o el expresidente Barack Obama. Durante estos años impulsó leyes para luchar contra el hambre, reducir el precio de los alquileres y mejorar la atención médica materna.
A medio camino de la presidencia de EEUU
En 2020, Kamala Harris hizo campaña para ser precandidata presidencial en el Partido Demócrata, pero abandonó la carrera en una fase temprana y, finalmente, Joe Biden la eligió para ser su compañera de fórmula. "Kamala es inteligente, dura, experimentada, una luchadora probada", decía el presidente.
De hecho, aunque de manera anecdótica, Harris probó el sabor del cargo supremo durante una hora y 25 minutos. Ocurría el 19 noviembre de 2022 durante la colonoscopia de Joe Biden en la que el presidente estuvo bajo el efecto de la anestesia y, a través de una carta dirigida al Congreso, decidía "transferir temporalmente los poderes y las responsabilidades de la oficina del presidente de Estados Unidos a la vicepresidenta". Fue, efectivamente, un momento histórico, pues nunca una mujer había estado en esa posición, ni siquiera de manera tan fugaz y testimonial.
Su impopularidad: de los prejuicios a la gestión migratoria
Sus malos datos de popularidad evidencian que el desgaste del Gobierno han pasado más factura a Harris que al propio presidente, Joe Biden. Las razones son una combinación de factores, entre las que algunos destacan los prejuicios raciales y de género que la rodean, a los que se suma la falta de protagonismo que ha obtenido durante el mandato y otras como la caótica retirada de las tropas norteamericanas de Afganistán y la gestión de la controvertida política migratoria de Estados Unidos.
De hecho, durante un viaje a Centroamérica, exhibió un discurso tan duro contra la inmigración que llegó a enfrentarle, incluso, con su compañera de partido, Alexandria Ocasio-Cortez: "Quiero ser clara con la gente de la región que está pensando en hacer ese peligroso viaje a la frontera entre Estados Unidos y México: no vengáis. No vengáis. Los Estados Unidos seguirán aplicando la ley y garantizando la seguridad en la frontera".
Un matrimonio maduro fruto de una 'cita a ciegas'
A punto de cumplir los 50, Harris conoció a su marido, el abogado Douglas EMhoff en una cita a ciegas organizada por un amigo y, tan solo un año después, en marzo de 2014, Emhoff le pidió matrimonio en el apartamento californiano de la política. Meses después, el 22 de agosto se dieron el 'sí, quiero' en Santa Bárbara, y este se convirtió en el primer segundo caballero de EE UU, y su representante público. Como homenaje a sus raíces, cuando se casaron, hace ya diez años, Emhoff pisó una copa de cristal con el pie derecho, como marca la tradición judía, y Harris colocó al novio una guirnalda de flores al modo indio.
Con Emhoff llegaron dos nuevas personas a la vida de Harris: Cole y Ella los hijos del abogado, llamados así en honor de dos grandes músicos de jazz, John Coltrane y Ella Fitzgerald, que inventaron un nombre para referirse a ella, que suma la palabra "mother" (madre) con Kamala: Momala.
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