Labordeta destaca de su último libro que es "optimista" y cree "fundamental asumir la palabra cáncer"
El escritor y cantautor aragonés, José Antonio Labordeta, presentó hoy su último libro 'Regular, gracias a Dios', del que destacó que es "optimista porque no echa tragedia de la enfermedad y recoge lo mejor que sale de cada momento", además se mostró convencido de que "es fundamental asumir la palabra cáncer"
Editado por Ediciones B, 'Regular, gracias a Dios' narra la infancia de Labordeta durante la Guerra Civil, los años de docente en Teruel recién casado, su breve estancia en París, sus vivencias como cantautor durante la Dictadura, la vida en Zaragoza y el cáncer que desde el pasado mes de noviembre le impide salir de casa.
En rueda de prensa, Labordeta relató que la "ventaja" de este libro es que "está escrito con alegría" porque lo inició al salir la primera vez del Hospital Miguel Sevet de Zaragoza y "decía ya no volveré, hasta que mes y medio después tuve que volver". Entre esos periodos de hospitalización ha sido su hija Ángela la que le ha ayudado a recopilar los escritos para dar forma al libro que terminó el pasado mes de febrero, la fecha de entrega fijada por la editorial.
"Lo he pasado regular", reconoció Labordeta, en referencia a la escritura de esta obra porque las páginas dedicadas a sus padres "han sido duras porque no sabía como iba a escribirlas. Podía ser pesimista o sentimentaloide". Tras reiterar que "me costó escribirlo", explicó que "antes hablaba de mis padres como de paso, como si fueran seres fantasmales y aquí aparecen unos padres humanos".
Uno de los personajes que tiene un especial presencia en el libro es su suegra, de la que aseguró que "era una mujer increíble y todos mis amigos tenían una buena relación con ella". Comentó la anécdota de que su amigo, el crítico de cine Luis Alegre "me decía que no necesitaba contestador en el teléfono porque mi suegra daba detalle de todo lo que hacía".
El libro está dedicado al área de Oncología del Hospital Miguel Servet de Zaragoza. Labordeta reclamó al Gobierno de Aragón que destine un "edificio vacío para trasladar el servicio de Oncología" al calificar de "pocas" las 22 habitaciones de la planta octava que están destinadas a esta patología en dicho centro. "Hay que reclamarlo porque además hay mucho enfermo joven" y expuso el ejemplo de Guipúzcoa, donde dijo se ha habilitado un edificio para estos pacientes.
Partidario de "hablar con normalidad" del cáncer, Labordeta se mostró a favor de "desenmascarar" esta enfermedad porque "a veces provoca dramas muy gordos y ves que lo tuyo no es nada". Sentenció que "no hay que dramatizar tanto con esta enfermedad y es fundamental asumir la palabra cáncer"."INCONCEBIBLE"
"Llegaré al mundial de fútbol", aseguró Labordeta, pero reconoció que "no se si me va a interesar" después de ver el partido de la final de la Copa del Rey porque "fue soso".
Sobre la situación política actual, el que fuera diputado de Chunta Aragonesista (CHA) durante dos legislaturas en el Congreso, dijo que "la veo con tristeza" al apreciar que "no se sabe cómo vamos a salir. Todos dan soluciones y nadie las pone en práctica".
Labordeta rememoró la última intervención que tuvo en el Congreso de los Diputados "cuando le dije al presidente Zapatero, después de que se portaran muy mal con Aragón, que la próxima legislatura no le votaría y ahora tengo el espíritu tranquilo porque lo que hace es inconcebible".
Pero además, criticó que el presidente del PP, Mariano Rajoy "tampoco hace nada. Están con la Gürtel a tope". No obstante, recordó que "aunque es una situación dramática otras veces se ha superado", en referencia a la crisis del petróleo de los años 1973-75.
Su impresión es que "este país es un corcho que se intenta hundir, pero siempre sale a flote y esperemos que podamos salir del follón, que es enorme".