Sara Baras, la artista gaditana, vive con pasión cada uno de sus proyectos. Ella se mostró ayer emocionada por poder estrenar en la Ciudad Condal y para toda España Sabores, un montaje de 14 números con el que homenajea a los grandes del flamenco en el pasado y también a la figura de la madre de Baras, quien la acercó a la vida y a la danza desde su más tierna infancia.
Acompañan a Baras en esta aventura escénica los bailarines y artistas invitados, José Serrano y Luis Ortega. Además se une a esta fiesta flamenca un cuerpo de baile de nueve personas y seis músicos dirigidos por José María Bandera.
La escenografía está despojada de elementos para ceder protagonismo a esta obra de una hora y veinte minutos sin argumento definido. En exclusiva, una explosión de arte, carácter y ritmo. Casi la totalidad de las coreografías pertenecen a Baras, a excepción de los solos de cada bailarín invitado y de un número conjunto de los tres, A fuego lento. Baras vuelve a firmar un vestuario en el que no faltarán los pantalones, puesto que «tengo libertad para ponerme lo que quiera», afirma la artista. Por su parte, los bailarines recuperan las castañuelas, un elemento flamenco que se ha perdido en los hombres.
A la gaditana la trata tan bien el público barcelonés que volverá, en esta ocasión al Tívoli, en el mes de mayo.
* Barcelona Teatre Musical (BTM). A las 21.30 horas. De 18 a 48 euros. Hasta el domingo.
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