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Defensa ofrece sus cuarteles de Canarias para que, "por razones humanitarias", se atienda a los inmigrantes

Un inmigrante de Mali es atendido en Mauritania en la zona de donde parten las pateras hacia Canarias (Reuters).
Reuters

El Plan fue acordado el miércoles durante la reunión convocada en La Moncloa por la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, en la que han participado los ministros de Asuntos Exteriores, Miguel Angel Moratinos; Interior, José Antonio Alonso; Trabajo y Asuntos Sociales, Jesús Caldera; y el Secretario de Estado de Defensa, Francisco Pardo.

En la reunión, convocada para dar respuesta al incremento de la inmigración en Canarias, se han acordado también medidas para reforzar la vigilancia costera y se contará con centros del Ministerio de Defensa para acoger a los subsaharianos.

El objetivo de las medidas adoptadas, según explicó en un comunicado la Vicepresidencia del Gobierno, es tanto reducir los flujos de inmigración ilegal, como mejorar las condiciones de acogida de las personas que ya han arribado a las costas españolas.

Así, junto al apoyo a Mauritania a través del Plan Urgente de Cooperación, asegura que "se dará respuesta a la solicitud de ayuda del Gobierno de Canarias, reforzando las infraestructuras, equipamientos y los medios técnicos y humanos precisos para hacer frente a la situación en las islas".

Para poner en marcha cuanto antes el Plan, León y Camacho, acompañados por un consejero del Gobierno de Canarias y un representante de la Comisión Europea, presentarán mañana mismo a las autoridades mauritanas las medidas acordadas. Destaca el ofrecimiento de patrulleras que puedan realizar la vigilancia de sus costas e impedir así que se hagan a la mar embarcaciones clandestinas, y la previsión de establecer centros de acogida gestionados por organizaciones no gubernamentales,

"donde los inmigrantes sean tratados dignamente".

Según explica la Vicepresidencia, se estudia además la reactivación del Acuerdo Bilateral de Readmisión firmado en su día entre los gobiernos de España y Mauritania, "garantizando en todo momento que su aplicación se lleva a cabo en condiciones de respeto a la seguridad y los derechos humanos de los inmigrantes".

En cuanto a las actuaciones en Canarias, Comunidad que soporta en mayor medida el incremento en la llegada de embarcaciones, el Gobierno asegura que reforzará la vigilancia costera por parte de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado.

Bono ofrece las instalaciones militares canarias

Si alguien cree que los barcos de la Armada van a abrir fuego como si se trataran de embarcaciones enemigas, está muy equivocado

El ministro de Defensa confirmó que las Fuerzas Armadas han ofrecido los cuarteles "para que de una manera lo más digna posible se pueda atender a esas pobres gentes que han pasado el calvario de cruzar el mar", y subrayó que el Ejército "no tiene la función de policía y, por lo tanto, la de control o la de parar" las oleadas de inmigrantes.

"Si alguien cree que los barcos de la Armada van a abordar estas pateras, o van a abrir fuego, o a no permitir el tránsito, como si se trataran de embarcaciones enemigas, está muy equivocado", manifestó Bono.

El titular de Defensa insistió en que las Fuerzas Armadas harán "lo que el Gobierno decida" y en que el Ejecutivo "no está pensando en utilizar a la Armada para contrarrestar o para atacar las embarcaciones que se acerquen al territorio español".

Crisis por la nueva oleada de indocumentados

Es un asunto de máxima gravedad que está desbordando todas las previsiones
Esta
nueva oleada de indocumentados ha agravado la alarma generada desde el fin de semana por la saturación de los centros de internamiento de inmigrantes del Archipiélago, ya desbordados o al límite de su capacidad el domingo, sin que el traslado por grupos a la Península de 158 de los retenidos haya permitido aliviar su situación, según confirmaron fuentes gubernativas.

De hecho, en Tenerife el vicepresidente del Cabildo Insular, José Manuel Bermúdez, hizo pública la "preocupación ante la avalancha de pateras que se está produciendo en los últimos días" en esa y otras islas, que calificó como "un asunto de máxima gravedad que está desbordando todas las previsiones" ante el cual pidió, "a la mayor brevedad posible, una respuesta inmediata del Estado español y de la Unión Europea".

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