A Leo Messi no hay quien le pare. Es el jugador que más goles le ha metido a todos los grandes equipos que se enfrentan al FC Barcelona. Leo es intratable y sin duda, aunque no lo quieran ver, es el mejor jugador del mundo actual.

Aunque en el duelo entre Messi y Cristiano Ronaldo quieran influirnos entre los partidarios del argentino o del portugués, los que nos consideramos imparciales vemos a Messi como el mejor. Lo de Cristiano Ronaldo es indiscutible también porque sus cifras son exageradas y serán muy difíciles de igualar. pero Messi además de goles es mucho más en muchos más terrenos.

El 10 del Barça sigue aterrorizando a todos los rivales a los que se enfrenta. Las caras de sus contrarios después de uno de sus goles o de cualquier carrera son todo un poema, preguntándose "cómo demonios se le puede parar". Los que prefieren al portugués buscan excusas a nivel de títulos colectivos, de balones dorados, de botas de máximos goleadores o de clasificaciones por aciertos en la Champions League. Está bien para los debates en programas o tertulias de aficionados en el café... para gustos los colores. El mío es del color de Leo Messi.

Messi es seguramente el más admirado y también el más odiado por sus rivales porque siempre aparece para matar los sueños o esperanzas de los contrarios. En Sevilla y contra el Betis, los atléticos y madridistas esperaban un tropezón del Barça para que sus equipos seguir agarrándose al clavo ardiente de la ilusión. Pero Messi rápidamente lo enfrió con 2 goles más un tercero impresionante que aleja a los culés y casi asegura el título para el FC Barcelona, al quedarse a 10 puntos del Atlético y a 12 del Real Madrid.

Con el impresionante tanto argentino casi todo el estadio Benito Villamarín se puso en pié y ovacionó a Leo, pese a que era el cuarto en contra de los suyos. Cuentan los historiadores que nunca antes en ese estadio se había aplaudido a un 'enemigo público' del Betis. Con ese golazo Messi y el Barça parece que se llevarán otra liga en su arrolladora era doméstica, que puede terminar esta temporada con un triplete con el mejor, Leo Messi, levantando LaLiga, la Copa del Rey y la Champions League.