Cinco posturas de yoga que te ayudarán a afrontar el estrés en la vuelta al trabajo
Tras un tiempo de vacaciones donde podemos desconectar y recargar energías, toca volver a la rutina del trabajo. En España es habitual tomarse unos cuantos días para poder celebrar las Navidades y pasados esos días, no son pocas las personas que se dan cuenta de la importancia de hacer algunos cambios en su vida para poder enfrentarse al estrés de la vuelta al trabajo sin que este se convierta en lo único que dirige nuestras vidas.
Encontrar la mejor manera de poder dejar las preocupaciones laborales a un lado y conseguir tener un poco de tiempo para nosotros mismos, para cuidarnos y descansar, se ha convertido en una prioridad para muchos, que seguro que han apuntado en su lista de propósitos de año nuevo hacer un poco más de ejercicio para alejarnos de un sedentarismo que no nos favorece.
Beneficios del yoga para la salud
El yoga puede ayudarnos a despejar la mente mientras entrenamos el cuerpo, una disciplina que cada vez tiene un número mayor de seguidores, que aprenden a controlar la respiración y a escuchar su cuerpo mientras fortalecen sus músculos. El yoga es una práctica que conecta cuerpo, respiración y mente.
Gracias a la práctica frecuente de esta actividad se pueden conseguir grandes mejoras, aumenta la flexibilidad y mejora la postura, pero también es ideal para tener una mejor coordinación y aumentar la concentración. Ayuda a dormir mejor y puede hacer que nuestras digestiones sean mejores. Mejora la confianza, favorece la relajación y reduce el estrés, mejora el sueño y reduce la presión arterial. Es una práctica ideal para quienes tienen dolores musculares o padecen ansiedad.
Todas las clases de yoga, independientemente del estilo de práctica que estemos desarrollando, tienen tres cosas en común:
- Respiración. Concentrarse en ella es parte importante del yoga.
- Posturas. Con ellas se potencia la fortaleza, la flexibilidad y el equilibrio y que varían su dificultad conforme al nivel de quien lo practica, pero también en función de los resultados que se quieren obtener.
- Meditación. La práctica suele terminar con unos minutos de meditación, que es ideal para calmar la mente.
Posturas de yoga para afrontar la vuelta al trabajo
Además de trabajar el cuerpo y calmar la mente a través de la práctica, hay algunas posturas que están más indicadas si queremos reducir el estrés que suele acompañar la vuelta al trabajo tras un tiempo de desconexión. Estas pueden ser ideales para esos primeros días y también para todos los siguientes.
- Balasana o postura del niño. Una postura ideal para principiantes, para calmar el espíritu, reducir el estrés y favorecer el sistema nervioso y el linfático. De rodillas sobre la esterilla, siéntate sobre los talones y extiende el cuerpo hacia delante, apoyando el pecho sobre los muslos. Apoya la frente en la esterilla y estira los brazos hacia delante.
- Vrikshasana o postura del árbol. Esta postura requiere gran concentración, lo que nos ayuda a apartar la mente de las preocupaciones diarias; permite alinear el cuerpo, por lo que es ideal para empezar la rutina. De pie, con los pies ligeramente separados, la espalda recta y la mirada al frente, apoyamos el peso sobre una pierna y flexionamos la otra, apoyando la planta del pie en el muslo o bajo la rodilla, donde nos resulte más cómodo. Elevamos los brazos sobre la cabeza y juntamos las palmas.
- Malasana o postura de la guirnalda. Se basa en la apertura de caderas que en yoga se relaciona con el efecto psicológico de abrirnos, de dejar ir lo que nos bloquea. Con las piernas abiertas un poco más del ancho de la cadera y los dedos de los pies apuntando hacia el exterior, flexiona las rodillas al máximo. Juntando las manos frente al pecho, usar los codos para presionar suavemente la parte interna de los muslos.
- Viparita Karani o postura del gesto invertido. Mejora la circulación, aumenta la energía, disminuye el dolor de cabeza y espalda y reduce el estrés. Tumbado en el suelo, acerca los glúteos al máximo contra la pared y apoya las piernas estiradas contre ella, estira los brazos hacia los lados, que queden paralelos a la pared y con las palmas de las manos mirando hacia arriba.
- Sarvangasana o postura de la vela. Estimula la circulación y, como otras posturas invertidas, estimula la glándula de la tiroides y el sistema hormonal. Trabaja el equilibrio y, con la práctica, puede ser muy relajante. Tumbado en el suelo boca arriba, eleva las piernas hasta que queden detrás de la cabeza, apoya las manos en la espalda y eleva las piernas hasta formar una línea.
Referencias
Yoga para la salud: MedlinePlus Enciclopedia Médica. (s. f.). https://medlineplus.gov/spanish/ency/patientinstructions/000876.htm