China enviará astronautas a la Luna antes de 2030 y su objetivo será recabar datos para instalar una base permanente
Continúa la carrera espacial por conquistar la Luna. Esta vez, China quiere que sus astronautas aterricen antes de 2023 en el satélite para explorar y traer muestras, además, la Agencia Espacial Tripulada de China (CMSA) tiene la idea de lanzar dos cohetes portadores para enviar un módulo de aterrizaje y una nave espacial tripulada a una órbita lunar. De esta manera, la nave y el módulo se encontrarán y se acoplarán entre sí para que los taikonautas ingresen en el módulo de aterrizaje.
Los cosmonautas llevarán a cabo tareas científicas, recolectarán muestras, regresarán al módulo para volver a la órbita lunar con el objetivo de acoplarse a la nave espacial y, después, retornaran a la Tierra con muestras lunares.
Para llevar a cabo la misión, Zhang Hailian (diseñador jefe adjunto de la CMSA) afirma en Xinhua que la agencia trabaja en el desarrollo "del cohete portador Long March-10, una nueva generación de naves espaciales tripuladas, módulos de aterrizaje lunares, trajes espaciales, vehículos lunares tripulados y otros equipos".
Las piezas clave para alcanzar la Luna
El nuevo cohete portador tendrá tres etapas y media con una capacidad de carga de unas 27 toneladas, mientras que su cuerpo medirá cinco metros de diámetro. Por otro lado, la nueva generación de naves espaciales tripuladas dispondrá de una torre de escape, una cápsula de reingreso y una cápsula de servicio.
En lo que respecta al módulo de aterrizaje, dicho elemento pesará 200 kilos y estará formado por una sección de aterrizaje y propulsión para enviar a dos taikonautas a la superficie lunar.
Asimismo, el traje espacial que se está desarrollando para el alunizaje contará con mejores movilidades para ayudar a los taikonautas a caminar, trepar, agacharse, conducir y operar máquinas.
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