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Estos satélites no pueden desplegar sus enormes antenas, un fallo que va a costar 600 millones de euros

El satélite contaba con una gran antena que tardaba días en desplegarse, pero, finalmente, no ha hecho ese último paso.
Viasat

La empresa de comunicaciones Viasat estaba trabajando en el despliegue de sus nuevos satélites de última generación Viasat-3 Americas desde que se lanzaron en un Falcon Heavy de SpaceX el pasado 30 de abril. En una declaración, han confesado que han tenido problemas para desdoblar su innovadora antena de malla, la cual era una pieza clave para ofrecer Internet de alta velocidad. 

El proyecto fallido de la compañía le costará unos 600 millones de euros en pérdidas y les obliga a revisar los otros satélites que ya estaban en construcción para un futuro lanzamiento. "Viasat y su proveedor de reflectores están realizando una revisión rigurosa del desarrollo y despliegue del reflector afectado para determinar su impacto y posibles medidas correctivas", han señalado.

Viasat ha reconocido que están "perfeccionando los planes de contingencia para minimizar el efecto económico". Tras el anuncio, las acciones de la empresa han caído considerablemente. Entre las soluciones que plantean, está la redistribución de satélites para optimizar la cobertura global o la reasignación de un satélite posterior de clase Viasat-3 para proporcionar ancho de banda adicional en América.

La firma se ha apresurado a explicar que el problema no supondrá interrupciones para los clientes ni fallos en la cobertura o capacidad de las constelaciones Viasat e Inmarsat que ya estaban operativas. Los nuevos satélites solo iban a proporcionar más Internet en más zonas del hemisferio occidental este verano.

En un principio, la idea de Viasat es lanzar dos satélites que cubran Europa, África, Asia y el Pacífico en los próximos dos años. El lanzamiento de finales de abril iba a servir para parte de ese proyecto, pero el error de las antenas retrasa el objetivo final.

La marca asegura que sus satélites serán capaces de controlar hasta 1 terabyte de datos por segundo gracias a sus grandes antenas parabólicas. David Ryan, presidente de redes espaciales y comerciales de la empresa, detalló que las antenas eran enormes y que, para desplegarlas, habían tenido que desarrollar un brazo retráctil y que el proceso tardaría días.

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