Tecnología

Análisis del Yeedi Vac Station: la 'roomba' china asequible que aspira, pasa la mopa y se vacía sola

Yeedi Vac Station tiene un diseño moderno y elegante y no es excesivamente grande, aunque si que es ruidosa cuando vacía el depósito
Yeedi

El objetivo de la industria de los aspiradores autónomos está claro: lograr un robot que limpie la casa y del que poder olvidarse el mayor tiempo posible. Para lograrlo, los fabricantes de ‘roombas’ han creado las bases de autovaciado, un accesorio cada vez más común entre los modelos prémium que, además de llenar al robot de energía, lo vacía de la suciedad que ha ido por la casa. 

Este avance tecnológico permite que el usuario pueda olvidarse de limpiar el pequeño depósito de polvo durante semanas. Marcas como iRobot o Roborock han implementado este nuevo accesorio en robots que rondan los 1.000 euros,

Ahora Yeedi, una marca más modesta y económica de origen oriental, ofrece su Vac Station por 450 €.

Un clon más potente

El robot en sí es un clon algo más potente que el Yeedi 2 Hybrid, un limpiador autónomo que, además de aspirar, es capaz de fregar y pasar la mopa, gracias a su depósito de agua. 

Sus 3.000 pascales ofrecen potencia más que suficiente para librar de polvo y suciedad superficial un hogar normal y el agua de su tanque (240 ml) dura un par de pasadas en una casa de unos 60 metros cuadrados. 

Su cámara le permite crear mapas bastante exactos del hogar y los divide en estancias no editables, por si el usuario quiere encargar al robot que limpie una habitación concreta o añadir límites virtuales, muy útiles para indicar a la aspiradora por dónde no desea que pase ni limpie.

Como ocurre con otras 'roombas', conviene retirar cables y pequeñas alfombras antes de iniciar la limpieza, ya que el Yeedi es propenso a pelearse con ellos y acabar atascado solicitando a ‘gritos’ la ayuda del usuario.

El robot es bastante bajito, por lo que es fácil que se cuele por debajo de los muebles y limpie incluso los rincones que el usuario normalmente no ve.

Cómo se controla

Mientras sus competidores suelen contar con botones para enviar el aspirador a la base o limpiar una zona en concreto de un par de metros cuadrados, el Yeedi tiene únicamente un botón para ponerlo en marcha o detenerlo. 

Para controlarlo es imprescindible hacer uso de la ‘app’ y conectarlo a internet. El proceso es muy cómodo y sencillo, usando un código QR en la pantalla del móvil y la propia cámara del aspirador. 

La Yeedi Vac Station se parece mucho a sus predecesoras y usa la misma ¡app' móvil
Yeedi

Una vez dentro de la aplicación, usuario podrá elegir entre tres modos de aspirado, que van desde uno realmente silencioso a otro más potente y escandaloso. También se puede regular en 3 niveles el caudal de agua que suelta el robot. Los modos más bajos de aspirado y fregado son más discretos y suficientes si el usuario programa una limpieza asidua de su hogar.

La aplicación informa asimismo de lo gastados que están los accesorios y permite programar las tareas de limpieza a horas y en días determinados.

El usuario debe elegir: fregar o aspiras alfombras

El Yeedi Vac Station es capaz de aumentar la potencia de aspirado cuando detecta una alfombra, pero evitará pasar sobre ellas cuando lleve instalado el módulo de fregado. Así, el usuario deberá elegir entre pedirle que friegue la casa y pase la mopa o que aspire las alfombras, mientras que otros robots del mercado hacen ambas cosas de una sola pasada.

Fabricada en plástico blanco y negro, la base de autovaciado tiene un diseño futurista y curvado que encajará bien en un salón moderno y es más pequeña que las de sus competidores directos. 

Una vez el robot termina de limpiar se dirige automáticamente a la base comienza la recarga y emite un potente sonido de aspirado para vaciar su depósito. Todo es automático y el usuario solo tendrá que preocuparse de cambiar la bolsa desechable cuando se lo solicite la aplicación.

Vuelta al pasado en busca del robot perfecto

Uno de los principales reclamos de los primeros robots aspiradores era que ya no necesitaban bolsa de desperdicios, pero este depósito desechable ha acabado volviendo ya que, aunque implica un desembolso de unos cuantos céntimos al mes, permite no tener que estar continuamente limpiando un pequeño depósito, cuyo vaciado a veces provoca que el usuario tenga que volver a aspirar.

Los robots aspiradores friegasuelos todavía no son completamente autónomos, ya que el usuario todavía tiene que andar detrás de ellos rellenando su tanque de agua y limpiando su mopa de manera periódica. Pero liberarse del engorro de vaciar el depósito de polvo gracias a las bases de autovaciado, es un paso en la buena dirección.

El Yeedi Vac Station, no es el más listo del mercado y sigue enredándose con los mismos cables y obstáculos que sus congéneres. También nos hubiera gustado que no hiciera elegir al usuario entre fregar el suelo y aspirar las alfombras y que hubiera cumplido ambas misiones de una sola pasada. Sin embargo, por 450 euros es un completo ayudante y bastante autónomo en la limpieza del hjogar.

loading...