En la última entrega de La última cena, los hermanos Frigenti se pusieron a los fogones para preparar un menú para los colaboradores de Sálvame y una invitada especial, Mónica Hoyos, con quien no compartieron mucha cordialidad.
Lo contrario ocurrió con Alonso Caparrós. El presentador de televisión, que suele mostrarse muy receptivo con todos sus compañeros, hizo lo propio con los cocineros, cuyos platos valoró muy positivamente, a diferencia del resto de comensales.
Alberto, el Frigenti que más protagonismo tuvo a lo largo de la noche, confesó que Caparrós era su "mito erótico de la infancia" y que aceptó ir al programa "por eso". Caparrós, que ha protagonizado varios titulares las últimas semanas por las confesiones sobre su pasado en Sálvame, se mostró encantado, y comentó haber tenido una experiencia homosexual en el pasado "no completa, pero sí avanzada".
Y es que, el colaborador expresó que le halagaba mucho que le llamaran mito erótico, especialmente cuando se trataba de "un hombre" quien se lo decía. Ante la sorpresa de los hermanos y de Jorge Javier Vázquez, que le preguntaron si había estado con algún chico, el aludido asintió.
Muy escéptico, el presentador de La última cena quiso saber si Caparrós repetiría la experiencia. "A ver, ahora mismo estoy muy enamorado de mi mujer, pero no tendría ningún problema", dijo con una amplia sonrisa.
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