El formato de RTVE MasterChef también se emite en otros países, entre ellos Chile, donde el domingo se vivió una situación surrealista para cualquier cocinero.
En el programa, los concursantes tuvieron que competir para ser los mejores platos de la noche y salvarse de hacer la prueba eliminatoria. Tres de ellos se salvaron y los demás tuvieron que enfrentarse a un reto: cocinar un plato con un bogavante como ingrediente principal.
Aunque parece una prueba fácil para cualquiera que sepa algo de cocina, el reto se convirtió en en la situación más incómoda del programa. Los chefs tuvieron que hacer el bogavante desde cero, es decir, hervir al crustáceo vivo, algo que a Karen Saavedra (que estaba esa noche salvada) le pareció demasiado.
La concursante aseguró estar muy angustiada y no poder presenciar el sufrimiento de los bogavantes. "Me da un dolor pero soberbio, son como langostas, está ahí vivo, se está moviendo, para mi es horrible, yo no puedo matar a un animal. Sí, preparo carne, como carne, ya, pero me entregan el trozo hecho, yo no veo sus ojitos, no veo que están vivos", explicó llorando.
"No quiero presenciar la prueba. No puedo, de hecho, si yo hubiese estado abajo habría renunciado. Me voy de MasterChef, no voy a renunciar a mis principios animalistas, ni morales, ni por la vida. Yo no mato ni a una hormiga, no puedo presenciar algo... me afecta demasiado", admitió.
Teniendo esta actitud, parece difícil que Karen pueda alzarse como ganadora de MasterChef Chile si le toca hacer una prueba similar a la del domingo.
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