Se cumple una semana desde que Eurovisión celebró su edición más convulsa y la Unión Europea de Radiodifusión (UER) todavía sigue pronunciándose sobre distintas polémicas, la mayoría de las cuales están relacionadas con la participación de Israel. Y es que hay distintos países que están presentando quejas por lo que vivieron, situación sobre la que España se ha pronunciado.
Aunque RTVE ya pidió a la organización del festival que velaran por la libertad de expresión después de que la prensa israelí acosara a un periodista español, lo cierto es que nuestra delegación mantuvo un perfil más bajo en esta controversia y fueron los representantes y equipos de otras regiones los que alzaron más la voz contra la participación del país hebreo y denunciaron los problemas que habían tenido.
Una de ellas fue Portugal, cuya representante, la cantante Iolanda, que llevaba las uñas pintadas con los colores de la bandera palestina, vio cómo su actuación tardó mucho en publicarse en YouTube y fue censurada en otras redes.
Por ello, la RTP, la cadena pública lusa "ha solicitado a Eurovisión una reunión para aclarar los incidentes de la final", entre ellos, "el retraso en la publicación del vídeo".
Pero a esta queja se han unido otros países, en concreto, Francia, Croacia, Noruega y, también, España, que es la primera vez que se posiciona tan firmemente contra la situación vivida en el festival.
16 países tuvieron problemas
Durante el concurso, participantes como Dons, de Letonia, Slimane, de Francia, o Nemo, artista de Suiza que ganó, hicieron proclamas de paz y libertad en clara alusión a la presencia de Israel en el festival y también lanzaron pullas hacia la UER por permitirlo.
Del mismo modo lo hizo Países Bajos, cuyo representante, Joost Klein, fue expulsado por una discusión con una fotógrafa. Y sobre este ha estado pronunciándose la AVROTROS, la televisión pública neerlandesa que considera "desproporcionada" la decisión de eliminarlos y está "extremadamente decepcionada" por ello, por lo que quiere aclarar la situación. Además, también aseguró que se vivió una "atmósfera insegura" en el backstage del concurso y señaló a la delegación hebrea por ello.
La denuncia de Bambie Thug, representante de Irlanda, también fue por la misma línea y aludió a las provocaciones de la televisión israelí y del equipo de Eden Golan, que fue apartada del resto a escasas horas de la final para evitar problemas.
Por ello, Irlanda dejó en el aire hasta el último momento su participación en la última gala y se reunió con la UER para atajar esta crisis. Pero no fueron los únicos, pues también Portugal, Suiza, Reino Unido y Noruega se plantearon retirarse del certamen.
De hecho, la TV 2 Direkte, cadena noruega, contó que fueron un total de 16, de las 37 regiones participantes, las que tuvieron algún tipo de problema, pues se posicionaron públicamente en contra, presentaron quejas formales o tuvieron reuniones de crisis.
El canal fue más allá y aseguró que "los participantes se sintieron inseguros, traumatizados y consideraron retirarse" y recordó las declaraciones de Gåte, el grupo que los representaba, que afirmó que "parecía que las normas solo se aplicaban para algunos", en alusión al trato a Israel frente a la expulsión de Países Bajos.
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