La versión argentina de Gran Hermano ha tomado como ejemplo el protocolo instaurado por la productora Zeppelin para evitar abusos y agresiones sexuales en el reality. 

Cinco años después de la presunta violación a Carlota Prado en GH Revolution, las productoras y cadenas ya aplican distintas medidas para que no se produzcan este tipo de casos, incluso fuera de nuestro país.

Una muestra de ello son las pautas que siguen los aspirantes de GH Argentina, quienes, a la hora de mantener relaciones sexuales, tendrán que confirmar si van a practicarse con el consentimiento de ambas partes.

Para transmitir esta información al programa, las parejas tendrán que mirar a cámara y levantar el dedo pulgar. De esta manera, el programa tendrá constancia de que las dos personas están de acuerdo.

A esta medida, denominada Thumbs up, se suma la norma de que los concursantes siempre tendrán que estar sobrios para mantener relaciones íntimas.

Dos participantes del concurso en Argentina ya han aplicado este protocolo, el cual ya se desarrolló en España en Secret Story. Elena y Alberto comenzaron una relación que fue dando pasos hasta que llegaron a la cama, momento en el que siguieron las pautas indicadas para dejar constancia de lo que iba a suceder entre ellos.