Astrid fue una de las concursantes de la reciente emisión de La ruleta de la suerte, en Antena 3, y durante la presentación que hacen los participantes al inicio del programa contó su historia, por la que se vio obligada a dejar la moda y emigrar. 

La mujer, de 38 años, aunque es diseñadora gráfica publicitaria, se dedicó a trabajar como modelo en Venezuela, su país natal, y estuvo en la edición 2001 del certamen Miss Venezuela.

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Sin embargo, la dura situación en el país la obligó a venir a España junto a su hija, que ahora tiene 14 años. "De la corona me tocó venir a España a la fregona, pero con mucho orgullo y dando gracias", decía la joven agradecida por su acogida en este país. 

"Aparqué mis sueños para darle una mejor vida a mi hija", confesaba Astrid, que bromeaba sobre su presencia en La ruleta de la suerte: "Estoy aquí para ver si alguien me ve", mientras se dedica a la estética facial. En su país hizo "muchas cosas en televisión", pero "justo cuando me dieron un papel cerraron el canal". 

Sobre qué haría con el premio del programa, lo tenía claro: "Quiero pagarle el boleto a mi madre para que venga", aseguraba, pues quiere que su madre viva con ella en España y porque no la ve desde que salió de su país.