El chef Dani García no dejó a nadie indiferente en su primera visita a El hormiguero este lunes. Tras opinar en el debate de la tortilla de la patata con o sin cebolla, prefiriendo la segunda opción, el andaluz le lanzó una pulla a Pablo Motos.

García comentó la actitud delvalenciano ante su menú en la boda de Pilar Rubio y Sergio Ramos, donde el cocinero fue el artífice de la comida que se sirvió en el enlace.

"Creo que no haré un evento jamás en la vida de ese nivel tan personalizado. A nivel creativo fue un esfuerzo brutal, pero salió todo genial si no fuera por dos comensales que nos dieron la noche", recordó. 

El chef destacó que uno de ellos fue Victoria Beckham porque "nos cambió todo el menú, todo a base de verduritas, además recuerdo que tenía al lado siempre un bol de caramelos de menta, agua de coco y gel hidroalcohólico". 

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Pero, para sorpresa de los espectadores, el otro fue el presentador del programa de Antena 3: "Fuiste un comensal tremendamente especial y me diste la noche", aseguró.

"Servimos la hamburguesa de wagyu con nuestra salsa, que es la mejor que tenemos, pero pediste que fuera aparte y la guarnición también... como un niño pequeño", afirmó el chef.

El valenciano, entre risas, le contestó que "tampoco te di tanto por saco, solo quité unos ingredientes porque si la carne está buena, tampoco necesita tantas cosas".

Para concluir, el chef le dijo a Motos que "nosotros intentamos hacer feliz a todo el mundo y tú te comiste las cosas a medias". Y le aconsejó que "hay que crecer gastronómicamente hablando".

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Cierre sorprendente de un local con 3 estrellas Michelin

"Cuando consigues la 3ª Estrella Michelín vas y cierras el restaurante", le dijo Motos a su invitado, que le explicó que “tenía claro que si llegaba el milagro de la tercera lo iba a hacer". 

"Tenía pánico de decírselo a mi equipo. También lo hice por respeto a la guía Michelín. Es que quería un proyecto más grande que no me obligara a estar en el restaurante", admitió.

El valenciano quiso saber como se sintió el chef al hacer eso: "No lo entendía nadie, pero es una cuestión de felicidad propia, llevaba 20 años cocinando en la alta cocina y a ella le debo todo". 

"Yo no estaba despreciando nada, pero creo que el mundo de la cocina es muy grande y más allá de la alta cocina", señaló el cocinero, explicando su decisión.

"¿Cómo se le pone nombre a un restaurante para que tenga gancho?", le preguntó el presentador: “Lleva un gran trabajo detrás, me inspiro en cualquier cosa como canciones… y siempre hay una historia detrás de cada nombre”, reconoció García.

Por último, Motos le pidió algunos consejos básicos para montar un restaurante de barrio. El cocinero le contestó que “hay que tener sentido común y cocinar para hacer feliz a la gente, no para lucirte tú”.