Tras años de tirantez, tantos como treinta, Vicky Larraz y Marta Sánchez han enterrado definitivamente el hacha de guerra. Hace unos años lo hicieron, también en televisión, pero de la mano de María Teresa Campos. Esta vez Déjate querer y Toñi Moreno fueron testigos de un nuevo encuentro de las cantantes después de muchos años de enemistad.

Fue Vicky quien decidió dar el primer paso, al mandar un mensaje y sorprendiendo a Marta, pues confiesa que entre ellas ha habido siempre "tirantez y sentimiento de rechazo".

La intérprete de Soy yo, que acudía al plató sin saber lo que iba a vivir en el programa de Toñi Moreno, charló con la gaditana y, poco después, descubrió que detrás de la sorpresa que el programa tenía preparada para ella estaba Vicky Larraz.

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Un encuentro que se produjo tres décadas después de que Marta entrara a sustituir a Vicky en Olé Olé, uno de los grupos que marcó la década de los 80.

"Quiero que sepas y que sientas, y dejarlo bien claro, que aquí estoy para lo que necesites, siempre", le dedicó Vicky. Marta recogió el testigo, asegurando que ella nunca había hablado mal de Vicky. "Aunque me tenías manía, nunca te lo tuve en cuenta". A continuación, Marta le dedicó unas bonitas palabras a Larraz.

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Después de este cruce de palabras, ambas desvelaron que ahora su relación está perfecta, algo que demostraron en el programa, cantando uno de los himnos de Olé Olé: No controles.