Michelle Jenner: "Ni con 30 años se está preparado para lo que la reina Isabel tuvo que hacer"

Lleva en sus venas una mezcla de sangres que no parece entorpecer su idiosincrasia española. De madre francesa y padre con ascendentes británicos, la Sarita de 'Los hombres de Paco' nació en Barcelona. Dulce y cercana en el trato, se muestra segura de sí misma a la hora de interpretar a la reina de Castilla.

¿Qué diría a los que critican por su juventud que encarne este papel?

¿Qué voy a decir? Lo estoy haciendo lo mejor que puedo. Es todo un reto, pero a los actores lo que nos gusta es que nos lo pongan un poquito difícil.

Muchas actrices matarían por algo así. ¿Cuál fue su reacción?

Con susto, por la responsabilidad. Al principio me impresionó mucho, pensé: "¡Voy a ser reina!". Pero al final se trata de la historia de una mujer, independientemente de que llegue a ser reina. Requiere mucho esfuerzo, me he documentado sobre su vida y he hablado con los directores para ver por dónde querían llevar al personaje, pero estoy muy feliz, porque es un papelón.

¿Ve ahora a Isabel de Castilla de forma diferente a cuando estudiaba Historia?

Sí, creo que era una mujer con un ‘par’, muy fuerte y que todo lo que tuvo que sufrir la ayudó a ser lo que era.

¿Qué admira más de ella?

La valentía que tuvo, siendo mujer en aquella época, se enfrentó a todos para ser reina.

¿Le da qué pensar la posición que ocupaba a su edad (25)?

Desde luego, si me dijeran que tengo que ser reina ahora, ¡me iría corriendo! Hoy en día nadie está preparado, ni con treinta años, para la mitad de las cosas que ella tuvo que hacer.

¿Vive este rodaje de forma diferente a otros?

Sí, porque estamos haciendo algo en lo que creemos de verdad. Hemos hecho una piña, y aunque aún no he podido rodar con Rodolfo Sancho, tengo muchas ganas, porque es perfecto para Fernando.

¿Cómo lleva tener que vestir prendas tan aparatosas?

¡La verdad es que nos pisamos todo el tiempo los unos a los otros! Me voy acostumbrando. Llevo corsé y al principio me resultaba muy difícil ir tan apretada. Pero es cierto que una vez te ves con el vestido, te da la actitud que necesitas, te cambia la manera de estar.

¿Cuál diría que es la parte más difícil de este nuevo reto?

Ser la protagonista de la serie, tengo que estudiar muchas secuencias, mantener el racord de emociones.

Cuando llega a casa, ¿con qué se queda del día?

Con el aprendizaje y los compañeros. Y lo que estoy disfrutando, para mí es como jugar, como cuando se disfrazan los niños pequeños y se lo creen.