Soraya, ex concursante de Operación Triunfo y la representante de España en el último Festival de Eurovisión, ha desvelado el calvario que vivió durante la preparación de su actuación en el XVIII Congreso de la Asociación Cultural de Eurovisivos de España (AEV).

La cantante ha descrito con todo lujo de detalles a la web Eurovisión-Spain.com los problemas que tuvo tanto con la coreografía como con la organización del acontecimiento. Según Soraya, aceptó el tema La noche es para mí porque lo veía muy eurovisivo y se sintió muy apoyada en la Red. "Si no hubiera sido por esos eurofans que hicieron campaña en Internet, no me hubiera presentado".

Sin embargo, no todo fue tan fácil como ella lo imaginaba. "Yo no decidí ni a la coreógrafa ni la coreografía que quería ni nada. A mí no me gusta la coreografía, me hubiese resultado más fácil estar en el centro del escenario, hacer cuatro cosas y no estar como un caballo por el escenario. Demasiado bien salió. Ni la tela fue como surgió. Fue como me lo plantearon", confesó. "No tenía ni voz ni voto para nada. Solo elegí el color del traje", añadió la extremeña.

Respecto a su posición en la clasificación, asegura: "No me importa haber quedado la 23 ó la 25. Se fue, se hizo el trabajo que se tenía que hacer y yo me vine a España con esa sensación. Si no gustó, pues no gustó. Si hubo más, me da igual. Tengo claro que esa espinita voy a tener que quitármela algún día y tendré que volver".

Para la cantante de 27 años, la decisión de Karmele Marchante de presentarse a la edición del Festival en 2010 le parece "una falta de respeto". "Me alegro de que TVE haya decidido que no estén por la labor de llevarla. A nivel general ya sabemos identificar lo que tiene que ir y lo que no. Que se dedique al periodismo porque en su época fue muy buena", señaló.