El comienzo de la temporada vacacional ha supuesto que algunos vecinos de Barcelona salgan a la calle a manifestarse bajo el lema Tourist go home (turistas, iros a casa). Las concentraciones y actos de protesta reivindican un cambio en el modelo actual de turismo y denuncian la masificación de algunas zonas, lo que origina problemas en los residentes.
Así, aunque normalmente este tipo de protestas se desarrollan sin incidentes, el pasado fin de semana Barcelona vivió una auténtica batalla entre residentes y turistas.
Al llegar la marcha a la zona del recorrido, los manifestantes se encontraron con diferentes grupos de turistas de parejas o familias con niños que trataban de disfrutar de la ciudad condal. Fue entonces cuando los activistas los increparon, lanzaron agua con pistolas de juguete e, incluso, trataron de precintar las terrazas de los negocios en los que se encontraban.
Este martes, desde el plató de Espejo Público, Susanna Griso ha mostrado su indignación al ver las imágenes: "¡Qué horrible, qué mal! Como barcelonesa, esta gente no me representa".
Por su parte, Ángel Antonio Herrera ha apuntado que es consecuencia del grave problema de vivienda que afronta España. Pese a este comentario, todos los colaboradores presentes en el plató del matinal han coincidido en que este tipo de conductas no tienen ninguna justificación.
El programa de Antena 3 también ha contactado en directo con Martí Cusó, uno de los activistas y organizadores de la manifestación que ha calificado de "anécdotas" desagradables estos incidentes que, además, no representaría el sentir de la concentración: "La manifestación daba respuesta a un malestar latente que hay desde hace muchos años en Barcelona respecto al modelo económico de ciudad".
Sin embargo, cuando Susanna Griso, en varias ocasiones, ha querido saber si Martí apoyaba a estos manifestantes que habían molestado a los turistas, este ha optado por ignorar a la presentadora y, finalmente, ha respondido: "El malestar es evidente y en una manifestación de miles de personas, como fue la del otro día, se expresa de muchísimas maneras".
Griso, visiblemente indignada, ha destacado que le daba "vergüenza ajena" la opinión de Martí Cusó que ha agregado: "Yo, como persona, no lo condeno. ¿Por qué tengo que condenar algo? No es mi trabajo. Mi trabajo es difundir el objetivo de la manifestación".
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