Este lunes 25 de octubre, Telecinco emitió una nueva entrega de El debate de las tentaciones. Presentado por Sandra Barneda, el programa contó con Cristian Jerez y Manuel González, participantes de La última tentación, como invitados, después de que Marina García no pudiera asistir por problemas de salud.

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Como colaboradora, y al igual que en las entregas anteriores, asistió Lola Mencía. Esta, llegado a un momento, se rompió al recordar lo juzgada y sola que se sintió en La isla de las tentaciones cuando sus compañeros decidieron hacerle el vacío al reprobar sus actos.

La joven, además, compartió en Supervivientes que se sumió en una profunda depresión a consecuencia de las críticas de los seguidores del programa, por lo que el recuerdo que tiene la también influencer del programa es más que amargo. 

El tema salió a consecuencia de un vídeo en el que Jesús Sánchez regañaba a Andrea Gasca por sus actitudes. Y es que, para el sevillano, una cosa era ser infiel y otra regodearse continuamente en ello y dejar en mal lugar al que hasta el momento seguía siendo su pareja, a colación del affair entre Andrea y Manuel, mientras Roberto sigue en Villa Luna.

Jesús insistía en la buena impresión que se había llevado de Roberto al conocerle y en que no se merecía lo que estaba ocurriendo. La conversación llevó a Suso a preguntarse por qué esa charla se la daba a Andrea y no a Manuel, que se había comportado igual y además era su amigo.

"Le pasó lo mismo a Lola, que todo el mundo la juzgó, pero a otros que hicieron lo mismo no se les cuestionó de igual manera", añadió Suso. Fue entonces cuando Lola recordó la etapa en la que más sola se sintió en la isla, empatizando en parte con Andrea pese a ser casos y personas muy distintos. 

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Y es que, a la joven le hicieron un auténtico interrogatorio al día siguiente de que le fuera infiel a Diego. "Tuve que contar lo que había pasado", recordó ella con amargura. Entonces, Terelu Campos, también colaboradora, dijo que lo que descolocó a la gente de Lola fue que sus actos no se correspondieron con sus palabras. 

Campos apuntó también que entendía que la joven se sentía anulada, algo a lo que se unió Sandra Barneda, destacando lo valiente que había sido tanto Lola como el resto de participantes por prestarse a la experiencia y la evolución que habían hecho. Pese al capote, Mencía rompió a llorar y mencionó lo mal que lo había pasado. 

"Entiendo todas las partes, de verdad que sí. Cada persona es un mundo y entiendo la parte de cuando te lo hacen a ti y cuando lo haces tú. Aunque parecía que no, soy muy empática, y a veces me equivocaba. Decía una cosa y quería hacer otra, porque sabía que lo estaba haciendo mal aunque, en el fondo, era lo que quería hacer... por eso estaba dando bandazos", explicó la veterinaria.