Hace días saltó la noticia de que el transeje del Porsche 550 Spyder que James Dean conducía cuando se estrelló y murió en 1955 salía a subasta y que se había vendido por 382.000 dólares (313.387 euros). 

Ahora ha trascendido quién fue el comprador y para qué quería esta pieza del considerado como "coche maldito", del actor, que falleció a los 24 años. 

El nuevo propietario de la pieza, que contiene la caja de cambios del coche, es Zak Bagans, el conocido presentador e investigador paranormal del programa Buscadores de fantasmas.

Zak Bagans es un incansable coleccionista de objetos macabros y, de hecho, ya ha revelado que piensa exponer la pieza "maldita" en su museo embrujado, en Nevada.

Hay muchas teorías ocultistas y conspiranoicas en torno a la muerte de James Dean y a lo que ocurrió después, pues a las piezas de su porche, que fue desmantelado y vendido por partes, se les atribuye una maldición e incluso muertes de algunos de sus propietarios. 

El eje fue adquirido por otro propietario privado en 2020 antes de ser vendido nuevamente este año, y está colocado en un soporte de exhibición de acero que imita el hueco del motor en el que estuvo.