Entre sidrería y sidrería, las plazas más bonitas de Asturias

Ya sea mirando al mar o a la montaña, los encantos de Asturias son muchos. La región es un (casi) perfecto compendio de costas, playas, montañas y villas. Ya lo dice su lema turístico desde hace décadas: "Paraíso natural".

El turista llega básicamente buscando sus playas, sus pueblos marineros o de montaña y todo apoyado en su rica y generosa gastronomía. Nos quedamos en lo urbano, para buscar sus plazas más bonitas.

Avilés: Plaza del Carbayo

Es el centro neurálgico del singular y durante muchos siglos marinero barrio de Sabugo, el único que en la Edad Media existía extramuros de la villa. De edificios de apenas dos alturas, buena parte la ocupa la románica Iglesia Vieja de Sabugo. Hoy, con sidrerías y terrazas, es un lugar donde sentarse a gusto.

Oviedo: Plaza de El Fontán

Es la plaza más bonita de la ciudad y, claro, la más turística. Es alargada y porticada. La actual es en realidad nueva. La original, de 1792, fue derribada en 1997. La que vemos, inaugurada en 1999, recrea aquella. A su lado el Mercado de Fontán.

Mieres: Plaza del Requejo

Queda junto a la iglesia San Juan y es lugar de multitud de sidrerías. Es el lugar por excelencia para escanciar sidra (en verano sus terrazas se ponen hasta arriba). Entre las iglesia y las sidrerías, edificios acristalados de una encantadora rusticidad.

Gijón: Plaza Mayor

Plaza más bien pequeña y empedrada, se encuentra en la zona baja del barrio de Cimadevilla. Está formada por edificios con arcos y soportales. En su bajos sidrerías y restaurantes. Suele ser escenario de ferias, espectáculos y mercadillos.

Tapia de Casariego: Plaza de la Constitución

Más conocida como El Parque, es algo así como el centro de la localidad. Aquí están el Ayuntamiento, el monumento a Fernando Tapia y, detrás, la iglesia de San Esteban.

Luarca: Plaza Carmen y Severo Ochoa 

Si vamos del puerto a su ayuntamiento, cruzamos por esta plaza, dedicada al premio Nobel español, nacido en Luarca. Sencilla y con el encanto de sus edificios.

Oviedo: Plaza Trascorrales

Pintoresca y transitada, los ovetenses le dicen plaza de la burra por la escultura que hay en su centro: un homenaje a las lecheras de otros tiempos. La plaza está en pleno casco antiguo, a pocos metros del ayuntamiento.