La increíble playa española escondida a la que se llega en barco o tras andar dos horas y media

La masificación turística de algunas playas durante los meses de verano nos hace querer buscar lugares cada vez más apartados para poder disfrutar de un día de arena y mar sin aglomeraciones. En este sentido, hay pocos arenales tan aislados y solitarios como el de Güi-Güi, en Gran Canaria. Este precioso enclave se encuentra en la costa oeste de la isla y solo podremos llegar a ella en barco o haciendo una ruta de dos horas y media.

Un lugar aislado y virgen

La playa de Güi-Güi es una de las más exóticas de Gran Canaria. El arenal se encuentra en el municipio de La Aldea de San Nicolás y, debido a su aislamiento, son pocas las personas que encontraremos allí. De este modo, aquí solo nos espera una naturaleza virgen, aguas tranquilas y arenas doradas, y por supuesto, un ambiente de paz y calma extrema.

Para llegar hasta el lugar solo existen dos opciones. La primera es en barco, ya sea en nuestra embarcación propia o reservando una excursión organizada por las bellas costas de la isla. La otra opción es solo apta para quienes tengan una buena forma física, y es que tendremos que hacer una larga caminata de dos horas y media con algún tramo dificultoso.

El camino parte desde el poblado de Tasartico, a hora y media de Las Palmas de Gran Canaria. A lo largo de 5 kilómetros (bien señalizados), nos conduce por constantes subidas y bajadas a través de un árido paisaje volcánico, remontando una montaña bastante elevada hasta la llamada Degollada de Aguas Sabinas.

Por lo tanto, necesitaremos madrugar lo máximo posible para evitar las horas pico del sol, ya que no hay sombras durante el camino, y llevar con nosotros agua fresca. Sin embargo, el premio vale la pena totalmente: un baño en aguas tranquilas entre barrancos y montañas.

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