Cinco pueblo de Las Merindades para disfrutar del norte de Burgos

Al norte de la provincia de Burgos, colindado con Cantabria y el País Vasco se ubica una región esculpida por el río Ebro y la cordillera Cantábrica, donde páramos y depresiones contrastan con valles y montañas. Se trata de la comarca de Las Merindades que, además de un entorno natural envidiable, también cuenta con un gran legado histórico pues desempeñó un significativo papel en la Repoblación, el proceso de ocupación de tierras deshabitadas o conquistadas a los musulmanes por parte de los cristianos.

Naturaleza, historia y costumbres, todo ello lo podemos encontrar en Las Merindades. La componen cerca de una treintena de municipios, pero los siguientes son una buena muestra de la región.

Frías

Frías encapsula un encanto medieval y está catalogado como uno de los "Pueblos Más Bonitos de España", . El pueblo se distribuye a lo largo de un peñón, con casas colgadas como faldón y coronado una fortaleza del siglo X incrustada en la roca. La muralla, el puente, el lavadero y sus numerosos templos completan la estampa medieval.

Frías está catalogada curiosamente como ciudad desde el siglo XV a pesar de no llegar a 300 habitantes, según el INE. El rey Juan II de Castilla le otorgó el título para intercambiar la localidad por Peñafiel con el conde de Haro.

Medina de Pomar

En el corazón de la comarca se ubica este pueblo tocado por el rey Carlos V en su último viaje antes de morir. Medina de Pomar está salpicado por varias torres, casonas y palacios. Destaca el Alcázar de los Velasco, una fortaleza del siglo XIV y actual Museo Histórico de Las Merindades, que supone un buen punto de partida para descubrir la comarca.

Espinosa de los Monteros

Rodeado por bosques, en Espinosa de los Monteros se encuentra al norte de la comarca, zona conocida como los valles pasiegos burgaleses. En esta localidad surgió el primer cuerpo de seguridad que más tarde se convertiría en Guardia Real. Palacios, casonas y edificios blasonados forman el conjunto monumental de Espinosa de los Monteros.

Puentedey

La minúscula localidad de Puentedey, de casi cien habitantes, alberga un magnífico puente de piedra que es donde se asientan las propias casas. Del conjunto medieval hay que destacar sus casas solariegas, el Palacio de los Brizuela (el punto más alto del puente) y la iglesia románica de San Pelayo. Tiene el reconocimiento turístico de ser uno de los "Pueblos Más Bonitos de España".

Villarcayo

Capital de comarca y centro geográfico de la misma, Villarcayo puede ser una buena opción para recargar baterías  y terminar la tarde tomando algo en su simpática Plaza Mayor o con un chapuzón en sus piscinas naturales del río Nela. Como peculiaridad, es la segunda localidad con el nombre más largo de España (Villarcayo de Merindad de Castilla la Vieja).

Qué comer en Las Merindades

Los productos de la tierra y los animales que se alimentan de ella son los productos a destacar de Las Merindades. Es imprescindible probar (y llevarse) productos de la matanza como el chorizo y la morcilla y siguiendo con el género animal, el cordero lechal es degustación obligatoria, así como la carne de caza. Por otro lado, las setas, los hongos y los quesos de leche de oveja son muy cotizados.

Si nos topamos con una panadería hay que aprovechar y pedir el torto o la rosca (una especie de pan preñao de chorizo) o un sobao o italianas (dulces con un característico sabor a mantequilla). El vino es algo obvio de mencionar tratándose de Burgos, pero concretamente en esta comarca se bebe el chacolí: un vino ácido, bajo en alcohol y refrescante por sus aromas de fruta y hierba y gas carbónico.

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