El encantador pueblo madrileño para hacer una escapada familiar

Muchas personas disfrutan estas semanas de unas esperadas vacaciones por Navidad, un momento ideal para hacer planes en familia y pasar tiempo con tus seres queridos. En este sentido, La Hiruela es uno de los pueblos mejor conservados de la Comunidad de Madrid que merece la pena visitar, ya que no deja indiferente a ningún turista. 

Este municipio rodeado de naturaleza, situado en un enclave como es la Reserva de la Biosfera de la Sierra del Rincón, es un lugar ideal para hacer una escapada durante estas navidades. 

Con poco más de 70 habitantes, este pequeño pueblo rural, compuesto por "casas de piedra, adobe y madera de roble de la dehesa", apenas ha sufrido cambios en su estructura desde que se construyó, por lo que La Hiruela tiene "una identidad arquitectónica propia", destacan desde el portal de Turismo del Ayuntamiento de La Hiruela.

Los principales atractivos turísticos

En la actualidad, La Hiruela conserva un "importante patrimonio etnológico" y mantiene su tejido urbano original, sin modificaciones que degraden el entorno ni construcciones de segunda residencia fuera del casco urbano. 

Algunos de los edificios y monumentos que debemos visitar en una escapada a este pueblo incluyen el Molino Harinero, a orillas del río Jarama, la Casa Consistorial, la antigua escuela, la Casa del Cura y la Casa de la Maestra. Asimismo, conviene visitar el popular Museo Etnográfico del municipio en el que se puede observar cómo era el modo de vida de otras épocas y su historia.

Por otro lado, el colmenar tradicional, con más de 200 años de historia, es otro de los atractivos turísticos de la zona, al haber sido uno de los motores económicos que permitió el desarrollo del pueblo. "En sus orígenes se trataba de un terreno comunal compartido por cinco familias dedicadas a la apicultura. A día de hoy no se ha sabido datar su antigüedad, aunque los más mayores del lugar aseguran que tiene más de 200 años", añaden desde el consistorio.

Otro de los puntos de interés es la Iglesia de San Miguel Arcángel, de estilo barroco. Asimismo, uno de los referentes etnográficos del lugar es la carbonera tradicional, que se empleaba para producir carbón vegetal.

Sendas en un entorno natural único

Pero el entorno de La Hiruela también es ideal para aquellas personas que quieran realizar excursiones y rutas de senderismo. La senda de las Eras y Pila de Riego es una de las opciones más populares, tiene dos horas de duración y permite a los visitantes conocer cómo eran los caminos por los que se transportaba el cereal.

Otra de las rutas más famosas es la de Molino a Molino, que discurre por sotos de álamos, bosques de sauces y riberas. La senda de la Fuente Lugar es una alternativa para todos aquellos que deseen dar un paseo, de una hora aproximadamente, entre cerezos, avellanos y abedules, siguiendo el cauce del río. Por último, la senda denominada como Los Oficios de la Vida es la mejor opción para contemplar el colmenar, la carbonera y el molino harinero. En un paseo de dos horas de duración, se puede conocer cómo era la vida antigua en el pueblo.