El Parador construido sobre un castillo con las mejores vistas del Guadiana
En la desembocadura del río Guadiana, justo en la frontera de España con Portugal, nos encontramos con la ciudad de Ayamonte. Esta localidad de la provincia de Huelva nos permite disfrutar de un turismo tranquilo, que combine un paseo entre edificios históricos desde la animada Plaza de la Laguna, con jornadas de playa en las aguas del Atlántico.
Si buscamos un alojamiento en la urbe, una opción muy interesante es el Parador de Ayamonte. Este hotel de cuatro estrellas se levantó sobre las ruinas de un castillo en la parte alta de la ciudad, y desde allí podremos disfrutar de unas vistas espectaculares del atardecer sobre el río.
La historia del castilllo
El Castillo de Ayamonte, ya desaparecido, se ubicaba antaño en el barrio de la villa, al norte de la localidad. En ese punto los romanos habían construido una primera fortaleza primitiva, pero no fue hasta el siglo XIII cuando se levantó el castillo como tal, durante la reconquista cristiana del sur de España. Su ubicación estratégica le permitía ser un punto de control fronterizo y de vigilancia de la costa.
A lo largo de su historia, este edificio que estuvo en sus orígenes en manos de la Orden de Santiago fue sufriendo numerosos cambios. De hecho, tras el terremoto de Lisboa de 1755, tuvo que ser reconstruido. Al siglo XX llegó en estado de ruina total, y sobre sus restos se levantó el actual Parador de Ayamonte.
El Parador de Ayamonte
En la zona norte de la ciudad, el Parador de Ayamonte vigila desde las alturas la desembocadura del Guadiana en el Atlántico. Sus vistas privilegiadas también incluyen las agrestes tierras del alrededor y las casitas blancas de Ayamonte. El hotel cuenta con 54 habitaciones, una piscina exterior, jardines y parking exterior.
Destaca también su restaurante de cocina tradicional onubense con influencias portuguesas. Jamón de Jabugo, embutidos de la Sierra de Aracena, raya, gambas blancas, chocos... son solo algunas de las delicias que podremos probar.