Hace unos días los usuarios de Twitter encontraban la red social plagada de unos misteriosos cuadrados verdes, amarillos y grises. El enigma tenía nombre, se llama Wordle y es el nuevo juego viral.

Su mecánica simple ha hecho que la gente se enganche a este pasatiempo mental del que sólo se puede echar una partida al día. El objetivo es adivinar una palabra de cinco letras únicamente en 6 intentos.

En primer lugar, el jugador pone algo al azar y el programa señala en verde si alguna de las letras que ha puesto están en la palabra objetivo y, además, situadas en ese lugar. Si el cuadrado se colorea en amarillo significará que, aunque la palabra final sí contiene esa letra, esta está en otra posición Por último, si la letra no aparece en la palabra final, el cuadrado será gris.

El origen del mismo, y el motivo por el que la página carece de publicidad, es que en realidad se trataba de un pasatiempo que ideó Josh Wardle como regalo para su pareja durante la pandemia. Ya en 2021 lanzó una web con el programa, cuyo nombre es un juego de palabras de su propio apellido, y en menos de dos meses contaba con más de 300.000 participantes. 

Además, la plataforma permite compartir los resultados de manera sencilla, lo que ha hecho que muchos usuarios se hayan animado a mostrar en Twitter qué tal se les ha dado la partida diaria de Wordle e, incluso, lo hayan tomado como una rutina.

Muchas personas han resaltado que la mecánica del juego les resultaba familiar, y es que es muy similar al Lingo, un programa de televisión que presentaba Ramoncín en los años 90 en TVE y que actualmente ha recuperado Canal Sur con Ana Ruiz como conductora. El concurso era tan popular que incluso sacó una versión en juego de mesa.

Los tuiteros no han tardado en bromear sobre este fenómeno viral, compartiendo sus propias interpretaciones de los cuadraditos, haciendo numerosos juegos de palabras imitando el juego o rescatando imágenes del conocido concurso televisivo.