Las industrias de la cultura y el entretenimiento, durante años reacias a los grandes cambios que trajo internet, han ido descubriendo alternativas digitales al universo analógico que imperaba en áreas como la música, el cine, los videojuegos o el sector editorial.

La primera en resistirse –y finalmente también someterse– al cambio fue la industria discográfica. Hoy, el negocio se desarrolla a través de plataformas como Deezer, Apple Music y Spotify, entre muchas otras. En cine y televisión, el modelo más imitado lo constituye Netflix, una plataforma que ofrece una tarifa plana de contenidos y que se ha convertido en el máximo referente de la industria audiovisual.

De hecho, otros sectores están tratando de reproducir con éxito esa misma estrategia. El último ejemplo es el ocio interactivo, donde Sony ha decidido tomar la iniciativa con PlayStation Now, un servicio de suscripción (con 7 días de prueba gratuitos) que permite acceder a través de la consola PS4 o un PC con Windows, vía streaming, a cientos de videojuegos.

Con este sistema, por el pago de una cuota mensual o anual, los suscriptores pueden acceder a más de 600 títulos de PlayStation 2, PlayStation 3 y algunos de la propia PlayStation 4, un amplio catálogo que irá creciendo y que de momento ya incluye videojuegos tan bien valorados como Metal Gear Solid V: The Phantom Pain, Red Dead Redemption, Bloodborne, The Last of Us, God of War III, Uncharted, Mortal Kombat X o Bioshock Infinite.

Esta propuesta, ideal para jugadores ocasionales que no buscan el coleccionismo sino la experiencia directa de juego, exige una buena calidad de conexión a internet, ya que todo se ejecuta en la nube. Como medida para obtener el máximo rendimiento, PS Now permite la descarga de los videojuegos de PS4 y PS2 (no los de PS3) directamente a la consola para garantizar la fluidez, poder jugar sin conexión y disfrutar de la resolución nativa del título.

La apuesta por el streaming es lo que diferencia a PlayStation Now de la oferta de Microsoft, un servicio de suscripción denominado Xbox Game Pass que permite jugar a diversos juegos previa descarga e instalación.

Por otro lado, poco después de la puesta en marcha del servicio de Sony, Google reveló su gran apuesta en el sector de los videojuegos, un servicio de streaming bautizado como Stadia que permitirá jugar a un juego en cualquier dispositivo, con la posibilidad de abandonarlo en un determinado punto, por ejemplo en el PC, y continuarlo luego en el móvil, una tableta, un portátil o incluso la televisión.

Sin embargo, quedan muchas dudas sobre este servicio. ¿Tendrá un amplio catalogo y funcionará efectivamente como Netflix y PlayStation Now o será una especie de nuevo modelo de distribución digital del que podrán hacer uso las distribuidoras de videojuegos? Google prometió dar más información este verano, lo que hace pensar que estarán presentes en el E3, la feria de videojuegos que se celebrará en Los Ángeles del 11 al 13 de julio.

Aunque el sector editorial aún tiene mucho camino por recorrer en este ámbito, ya existen numerosas plataformas que han trasladado el modelo Netflix a los libros. El máximo referente en España es Nubico, una plataforma española de lectura digital que, mediante suscripción, permite acceder a más de 50.000 libros y 80 revistas cada mes a través de hasta cinco dispositivos a la vez.

Lanzada en 2013 por Telefónica y Círculo de Lectores al cincuenta por ciento, la tarifa plana de ebooks de Nubico ha cumplido cinco años de constante crecimiento que pueden ir aún a mucho más a medida que los lectores vayan abandonado el papel e iniciándose en los libros electrónicos.

Otro proyecto patrio es Odilo, una biblioteca digital inteligente fundada y dirigida por el murciano Rodrigo Rodríguez que en realidad tiene otro enfoque pero que se aprovecha de un modelos similar, no dirigido a usuarios finales sino a bibliotecas públicas, colegios, universidades, empresas y asociaciones.

"Nuestra misión es promover la igualdad educativa poniendo a disposición contenido digital de alta calidad accesible y asequible para todos. Nuestro objetivo es mejorar el nivel de alfabetización y las competencias del s.XXI —en concreto, pensamiento crítico, colaboración, comunicación y creatividad— de millones de lectores y estudiantes de todo el mundo", explican los responsables de Odilo.

A nivel intenacional suenan nombre como Kindle Unlimited, de Amazon, la cada vez más popular 24SYMBOLS, la veterana Scribd, que comenzó en realidad como red social para la lectura, Bookmate, una plataforma de creación británica que ha comenzado a abrirse mercado en Latinoamérica, o la holandesa Bookchoice, que también incluye audiolibros.

En cuanto a prensa, Apple se ha revelado como la gran compañía más interesada en el negocio. Su ambicioso proyecto nació bajo el nombre de Texture y ahora se ha reconvertido Apple News+, un servicio que proporciona el acceso a más de 300 libros y revistas. Eso sí, de momento el objetivo está puesto en el mercado anglosajón y no hay previsiones de que llegue a España.